Felipe VI elogia la “firmeza y autoridad” de su padre para frenar el golpe hace 40 años

Felipe VI ensalzó ayer el decisivo papel que desempeñó su padre, Juan Carlos I, para que fracasara la intentona golpista del 23 de febrero de 1981, al asegurar que “su firmeza y autoridad fueron determinantes para la defensa y el triunfo de la democracia”.

El rey presidió el acto con motivo del 40 aniversario del 23F celebrado en el Congreso con la asistencia del jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, de los poderes del Estado, buena parte del gabinete, y de representantes de grupos parlamentarios, aunque con la ausencia de los partidos nacionalistas e independentistas de la Cámara.

Batet detuvo el Pleno del Congreso a la misma hora del 23F para celebrar la victoria de la democracia

El rey emérito fue el protagonista ausente al seguir expatriado en Emiratos Árabes Unidos por la polémica por sus presuntos negocios ocultos en el extranjero. Desde su marcha de España, Felipe VI no había hablado de él y aprovechó el recuerdo del 23F para destacar como hace 40 años asumió “su responsabilidad y su compromiso con la Constitución” con el mensaje televisado que neutralizó la asonada militar de Antonio Tejero.

Un discurso que, sin embargo, no mereció el aplauso del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, ni de los representantes de Unidas Podemos.

A la otra persona que mencionó fue al expresidente del Gobierno Adolfo Suárez, a quien mostró su “gran admiración y gratitud”. Junto a ellos, homenajeó a todos quienes ofrecieron ante el golpe “un ejemplo de coraje y de lealtad a las instituciones del Estado y a la Constitución” para detener el asalto militar.

La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, se unió al elogio al rey emérito por frenar a quienes “pretendieron destruir la democracia” y que “no han dejado más que su recuerdo como ejemplo de fracaso”. Batet alertó del peligro que entrañan hoy en día algunos de “los enemigos de la democracia”, entre los que citó “la deslegitimación y la instrumentalización” de las instituciones para “desnaturalizarlas”, la polarización y el populismo. Por ello, hizo un llamamiento a la unidad de todas las instituciones ante las “amenazas” de “ruptura” del sistema constitucional.

Ayer, Batet detuvo el Pleno del Congreso a las 18:23 horas, a la misma hora del 23F, para celebrar la victoria de la democracia constitucional.

La portavoz el Gobiero, María Jesús Montero, dijo que “no hay discusión respecto al papel que jugó el emérito en la consolidación de la democracia”, por lo que pidió “rigor” en la interpretación de la Historia.

Por su parte, la portavoz del PP, Cuca Gamarra, aseguró que “solo se celebra la democracia” y reivindicó el papel “esencial” que jugó el rey emérito para que “fracasara” el 23F.

Iglesias ve un “clamor” contra el emérito y Sánchez, fuerte al Gobierno El vicepresidente segundo y líder de Podemos, Pablo Iglesias, dio ayer la nota discordante dentro del seno del Gobierno de coalición al afirmar que la monarquía ya no es “condición de posibilidad” para que haya democracia en España, frente a lo que ocurrió en la Transición y ante el avance del republicanismo, y subrayó que existe en el Estado “un clamor social” ante la marcha del rey emérito Juan Carlos I mientras hay gente que “va a la cárcel” por escribir un tuit o una canción. Con ello, deslizó la situación generada por la entrada en prisión del rapero Pablo Hasél.

Por otra parte, el vicepresidente segundo del Gobierno advirtió al PSOE de que es un “error tensionar” el Ejecutivo al plantear en la nueva ley de Vivienda que se pueda “traicionar la palabra dada” e “incumplir el acuerdo” para regular los precios del alquiler en mercados tensionados.

Con todo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ratificó su satisfacción con el Ejecutivo de coalición que comparte con Unidas Podemos, y frente a las desavenencias que se vienen manifestando, recalcó, “nos unen más cosas que las que nos separan”.

Sánchez salió así en defensa del pacto con la formación de Pablo Iglesias en su contestación, en la sesión de control del pleno del Senado, a una pregunta del portavoz del Partido Popular en la Cámara, Javier Maroto, quien le reprochó falta de valentía para poner fin a las actitudes de Podemos que considera que son las que suponen realmente una anomalía democrática.