ECONOMÍA
Techo Cívico presenta el estudio previo de viabilidad para crear un edificio de 25 viviendas en régimen cooperativo en Lleida
El proyecto tendrá que superar varios trámites urbanísticos para salir adelante
La cooperativa de vivienda social Techo Cívica ha presentado este miércoles a la Empresa Municipal de Urbanismo (EMU) de Lleida el estudio previo de viabilidad para crear un edificio residencial de 25 viviendas en régimen cooperativo en cesión de uso en la capital del Segrià, que se ubicará en un solar de la calle Enric Roca Peralta.
La promoción tendrá un presupuesto de 4,1 millones de euros que permitirá que las viviendas sean asequibles, con un precio inferior al del mercado de Lleida por obra nueva.
El desarrollo del proyecto requiere la aprobación por parte del pleno municipal de la cesión de suelo a favor de Techo Cívico. Antes, sin embargo, hará falta resolver dudas sobre tramitaciones urbanísticas y concretar algunos de los escenarios de financiación.
El concejal de Vivienda y Transición Ecológica de la Concejalía y presidente del EMU, Sergi Talamonte, y técnicos de Techo Cívico han mantenido este miércoles una reunión de trabajo en la cual se ha presentado el estudio previo de viabilidad para la creación de un edificio residencial cooperativo en cesión de uso en Lleida.
Las dos partes han analizado las condiciones urbanísticas y arquitectónicas del proyecto, a la vez que también han hecho una previsión económica y financiera de la promoción de estas viviendas.
La Empresa Municipal de Urbanismo y Techo Cívico firmaron el agosto pasado un convenio para promover este edificio de viviendas en régimen de cesión de uso en el barrio de Ciudad Jardín. Así, el EMU se comprometía a ceder el derecho de superficie del solar durante 75 años por posibilitar en cuanto los socios conviventes puedan acceder a una vivienda digna, estable y asequible.
Este miércoles, se ha presentado un anteproyecto, que prevé un edificio de 25 viviendas, con superficies que oscilarán entre los 45 m2 de los estudios; los 54 m2 de las viviendas de un dormitorio o dos, hasta los de tres dormitorios que tendrán una superficie de 82 m2. Una vez terminados los trámites urbanísticos previos, Techo Cívico hará un llamamiento a personas interesadas para constituir el grupo de socios futuros conviventes del proyecto e iniciar, así, el proceso participativo del diseño arquitectónico del proyecto definitivo.
Talamonte ha valorado positivamente el hecho que "las personas que vivirán en el edificio formen parte del proceso de diseño, ya que eso permite canalizar sus aportaciones y puedan tomar las decisiones" con respecto a la promoción de las viviendas.
"El de Techo Cívico será un proyecto pionero en Lleida que se suma a todo un conjunto de nuevas modalidades de acceso a la vivienda que estamos implementando en la ciudad para hacer frente a la emergencia habitacional que sufrimos y que se ha visto acentuada con la covid", ha remarcado el responsable municipal.
Àngel Estévez, coordinador de proyectos de Techo Cívico, ha señalado que la cooperativa "apuesta para la transición energética y la sostenibilidad ambiental".
Según Estévez, la cooperativa se ha dotado de una serie de criterios de diseño medioambiental que se implementará en el proyecto de vivienda cooperativa de Lleida. "Tendrá una certificación energética A y será un edificio de consumo energético casi cero", ha resaltado.
Vivienda cooperativa en cesión de uso
El modelo que presenta Techo Cívico es una forma de promoción inmobiliaria que vela por garantizar el derecho a la vivienda.
En este modelo, la titularidad de la propiedad es colectiva y recae en la cooperativa, de manera que las personas socias tienen la cesión de uso de las viviendas cooperativas indefinidamente o por un periodo muy largo de tiempo.
Estas viviendas cooperativas, pues, se calificarán como viviendas de protección oficial (HPO) para asegurar el derecho a la vivienda de las personas que tengan una situación de vulnerabilidad.
El patrón económico que seguirán las personas que formen parte de la cooperativa es el que marca la propiedad colectiva y la cesión de uso, es decir, pagarán una aportación inicial -retornable en caso de que uno se tenga que marchar del edificio- y una cuota mensual que deriva de los costes de adquisición, mantenimiento y funcionamiento del proyecto de vivienda cooperativa.
De esta manera, sale de aquello que marca el mercado especulativo y los pisos tienen un precio más asequible, para garantizar el acceso a la vivienda.