Llarena busca el aval del TJUE antes de activar nuevas órdenes de detención

Coincidiendo con la decisión del Parlamento Europeo de retirar la inmunidad a Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí, el magistrado del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, movió ficha y elevó una cuestión prejudicial al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) para tratar de lograr su aval antes de resucitar las euroórdenes contra los tres eurodiputados de JxCat. Aun así, sin esperar a la respuesta de este tribunal, las podría reactivar igualmente.

De esta forma, Llarena instó a los magistrados comunitarios a que se pronuncien sobre los motivos en los que se puede fundamentar la denegación de una euroorden, así como sobre las posibilidades de emitir una nueva. En base a la respuesta del TJUE, el magistrado instructor de la causa del 1-O decidirá “si mantiene, retira o emite” órdenes europeas de detención y entrega contra Puigdemont, Comín y Ponsatí.

Y es que Llarena ya ha visto como los tribunales belgas le han denegado en firme la extradición de Lluís Puig, conseller de Cultura en el Govern de Puigdemont. Además, en 2018, la Justicia alemana sólo se mostró dispuesta a entregar a Puigdemont por un presunto delito de malversación, y no por el resto de cargos que le imputaba el propio Pablo Llarena.

Los procedimientos de extradición al Estado español del propio Puigdemont, de Comín y de Ponsatí se paralizaron en el momento en que se convirtieron en eurodiputados, al estar amparados los tres por la inmunidad parlamentaria que les fue retirada ayer.