Dice que mintió al acusar al profesor decapitado en París

La investigación sobre el asesinato del profesor francés Samuel Paty, que fue decapitado en Conflans-Sainte-Honorine, en un suburbio al noroeste de París, tras mostrar unas caricaturas de Mahoma en una clase sobre libertad de expresión, ha desvelado que la alumna que le acusó de islamofobia, hecho que fue el detonante que desembocó en el asesinato, mintió.

La menor, de 13 años de edad, que está siendo investigada por un delito de denuncia calumniosa, en un primer momento contó a la policía que Paty había instado a los estudiantes musulmanes a abandonar el aula antes de presentar las caricaturas del profeta Mahoma. No obstante, más tarde admitió que no estuvo presente ese día en clase puesto que había sido expulsada del centro dos días por su comportamiento y que todo lo que sabía era lo que había escuchado más tarde por boca de otros compañeros de clase.

El padre de la menor inició una campaña contra el profesor acusándolo de islamofobia

Esa primera versión de la historia fue también la que la adolescente contó a su padre que, indignado, la publicó en redes sociales a través de un vídeo. El hombre también difundió el número de teléfono de la víctima, su nombre y la dirección del colegio en el que trabajaba.

En cuestión de días, la familia fue apoyada por el activista islamista “S-file” Abdelhakim Sefroui, quien transmitió la información en otro vídeo. Los dos hombres, acusados de “complicidad en asesinato”, se encuentran en prisión preventiva.

La campaña iniciada contra el profesor, de 47 años, llegó hasta Abdullakh Anzorov, el terrorista de 18 años y de origen checheno que más tarde asesinaría a Samuel Paty a la salida del centro. 

Según el diario Le Parisien, la menor había mentido a su padre porque no quería que supiera que había sido expulsada, ya que estaba acomplejada por los buenos resultados académicos de su hermana.

Dos detenidos por la muerte de una compañera de instituto

La gendarmería francesa detuvo ayer a dos jóvenes de 15 años por su presunta implicación en la muerte de una compañera de instituto de 14 a la que encontraron muerta el lunes en el río Sena a su paso por el Valle del Oise. Según informó el diario francés Le Monde, el suceso estaría relacionado con un caso de acoso escolar. La víctima habría sido golpeada por los ahora arrestados antes de que estos la arrojaran al río y huyeran del lugar. La madre de uno de los presuntos homicidas fue la que denunció el crimen tras confesárselo su hijo, quien también le indicó a la policía donde arrojaron a la joven.