Nueva matanza en Birmania

Al menos 114 personas, entre ellas tres niños, fallecieron por la brutal represión ejercida ayer por las fuerzas de seguridad en Birmania contra los manifestantes que salieron a protestar una vez más contra el golpe de Estado militar del pasado 1 de febrero en más de 40 localidades. Esta vez las manifestaciones se vieron revigorizadas por tratarse del día de las Fuerzas Armadas en el país asiático.

Los soldados, militares y Policías cumplieron así con la amenaza lanzada la noche del viernes a través de la cadena de televisión y la radio estatal de que “dispararían a matar, con tiros en la cabeza y por la espalda” a todo aquel que se atreviera a desafiar su autoridad convirtiendo la jornada de protestas de ayer en la más sangrienta desde el golpe de Estado. Hasta la fecha, más de 400 personas han perdido la vida en Birmania debido a la represión ejercida por la junta militar.

Los indiscriminados ataques de las fuerzas de seguridad ocurrieron de forma simultánea a la celebración del Día de las Fuerzas Armadas, que se conmemoró en Naypyidó con un desfile militar presidido el comandante en jefe del Ejército birmano, Min Aung Hlaing. Desde allí el jefe militar volvió a lanzar promesas de elecciones libres. “El Ejército quiere tender la mano a toda la población y salvaguardar la democracia”, aseguró el general en un discurso televisado, en el que añadió que las autoridades buscan restaurar la paz en el país, perdida desde la asonada de febrero.

Los militares tomaron el poder con la excusa de un supuesto fraude electoral en los comicios del pasado noviembre, en los que arrasó el partido de la líder depuesta y nobel de la paz, Aung San Suu Kyi, y que fueron declarados legítimos por los observadores internacionales. Desde ese momento, la junta militar ha detenido a más de 3.000 personas, incluida Suu Kyi y su Gobierno. Además, las autoridades llevan disparando a manifestantes casi a diario, a pesar de las duras condenas de la ONU, la UE y varias países.

China y Rusia muestran apoyo a la junta militar El desfile militar celebrado en Birmania para conmemorar el días de las Fuerzas Armadas fue boicoteado por la mayoría de países e incluso algunas embajadas, incluida la española, sustituyeron la foto de portada de sus páginas en diversas redes sociales por el color negro en señal de protesta. No obstante, diversos países mostraron su apoyo a la junta militar birmana enviando al evento a algún representante, entre ellos de Rusia, que mandó a su viceministro de Defensa, Alexander Formin, y China.