SUCESOS AGRESIÓN
Arrestado un falso osteópata por abusar de una paciente
En Barcelona, donde drogó a la víctima durante una sesión|| El hombre tiene antecedentes por delitos de violencia de género
Los Mossos d’Esquadra detuvieron a principios de semana a un hombre de 38 años de edad que se hacía pasar por osteópata en su domicilio particular de Barcelona y que presuntamente abusó sexualmente de una de sus pacientes tras drogarla vertiendo alguna sustancia estupefaciente que introdujo en su bebida.
La víctima conoció al agresor a través de las redes sociales. Tras contactar con él, acudió a su consulta en varias ocasiones hasta que un día, al terminar una sesión, el falso terapeuta le ofreció una bebida que, según le dijo, era un relajante muscular. No obstante, tras tomársela la mujer empezó a sentirse mareada y perdió parcialmente la consciencia, momento en el que el hombre aprovechó para abusar sexualmente de ella. Cuando la vícitma recuperó plenamente la consciencia, y después de recibir atención médica, se dirigió a una comisaría de los mossos para denunciar los hechos.
La policía le atribuye también un delito de intrusismo laboral al no estar titulado
Los investigadores comprobaron que el agresor no estaba colegiado, motivo por el que se le atribuyó también un delito de intrusismo laboral. Además descubrieron que el individuo tenía antecedentes penales por varios hechos, entre ellos delitos de violencia machista.
Por el momento la policía catalana le atribuye este único caso de abusos sexuales, pero no descarta que puedan aparecer más denuncias contra él a raíz de la ya presentada.
El detenido quedó en libertad con cargos tras prestar declaración antes ante el juez.
“Desde Mossos recordamos la importancia de informarse bien antes de contratar el servicio de un profesional y recomendamos siempre asegurarse de que tenga una titulación oficial”, apuntó el cuerpo policial tras salir a la luz el caso.
En febrero la Guarcia Civil detuvo en Burgos a un osteópata que aprovechaba las sesiones de masaje, con las que aseguraba paliar determinadas dolencias, para abusar de sus pacientes. Las víctimas tenían entre los 46 y los 59 años y procedían de Barcelona, Vizcaya y Burgos. El detenido aseguraba haber obtenido su titulo en Sudamérica.