El independentismo desatasca la negociación y Aragonès revela la estructura de su Govern

ERC y JxCat lograron ayer desencallar las negociaciones para investir a Pere Aragonès como president de la Generalitat y conformar un nuevo Govern independentista. Después de más de tres horas de reunión entre los muros de la prisión de Lledoners, y en presencia del presidente de los republicanos, Oriol Junqueras, y de Jordi Sànchez, secretario general de los juntistas, los equipos negociadores de ambas formaciones lograron pequeños avances en las conversaciones, después de semanas de reproches cruzados y de ultimátums.

El propio Aragonès, por primera vez, puso sobre la mesa la estructura que quiere para el futuro Executiu, que no incrementaría el número de departamentos, pero sí que introduciría tres nuevas carteras, que serían la de Feminismo, la de Acción Climática y la de Universidades e Investigación. Queda pendiente, sin embargo, el reequilibrio de cada una de las consellerias, así como el reparto de poderes entre ERC y JxCat.

Por otra parte, los dos partidos también abordaron la definición de la estrategia independentista para los próximos años, así como el programa del nuevo Govern. También hablaron de cómo gestionar y de quién gestionará los fondos europeos para la reconstrucción. Ello en la que fue la primera reunión presencial al cien por cien, con la presencia del máximo dirigente de ERC y del de mayor rango de JxCat después de Carles Puigdemont, que permanece en Bélgica desde justo después de que el Parlament proclamara la independencia, el 27 de octubre de 2017.

Aragonès desgrana la estructura de su Govern, a falta de reequilibrar las carteras y repartirlas

Con todo, este primer paso para el entendimiento entre las dos principales fuerzas del independentismo se produjo a pocos días de que expire el ultimátum que lanzó el domingo Aragonès para cerrar un acuerdo con JxCat, antes de explorar “vías alternativas”.

En la cumbre también hablaron de la estrategia del ‘procés’ y de la gestión de los fondos comunitarios

Sin embargo, como precisaron los republicanos el lunes, todas estas alternativas pasan por entenderse con JxCat, e incluso insistieron que, más allá del primer de mayo, fecha en la que expira el plazo dado por Aragonès a los juntistas, no se cierran a conformar un Govern de coalición con los de Puigdemont, posibilidad esta última que va tomando forma.

Y es que la portavoz de la Generalitat y consellera de Presidencia, Meritxell Budó, de JxCat, defendió que republicanos y juntistas se tomen el tiempo “que sea necesario” para alcanzar un acuerdo de legislatura que garantice “estabilidad” en los próximos años en Catalunya.

Pocos cambios en el reparto de los grupos en el Parlament Los portavoces de los grupos parlamentarios acordaron ayer el reparto de escaños en el hemiciclo. Los independentistas, como ya ocurrió en la pasada legislatura, mantendrán la bancada de la izquierda.

En la de la derecha seguirá el PSC, que aspiraba a abandonarla, aunque finalmente ha aceptado mantenerse en ella. Le acompañarán los diputados ultraderechistas, los de Ciudadanos, los del PP y los de los comunes.

Y es que los de Jéssica Albiach regresarán a los escaños que ocuparon los parlamentarios de Catalunya Sí Que Es Pot durante la legislatura 2015-2017. Los diputados de Vox y los del PP quedarán relegados a la última bancada.

ERC, PSC y JxCat desvelan los senadores por designación ERC, PSC y JxCat desvelaron entre ayer y el lunes los ocho senadores por designación que elegirá el Parlament para que le representen en la Cámara alta española. Como ya pactaron los independentistas y los comunes, ERC tendrá tres senadores por designación, tres más el PSC y dos JxCat, a fin de que los ultraderechistas de Vox no obtengan ninguno.

Por los republicanos serán Josep Maria Reniu, Adelina Escandell y Pau Furriol. Los socialistas propondrán a Antoni Poveda, Manel de la Vega y a Lorena González, de Balaguer.

Por su parte, los juntistas optarán por la continuidad y apostarán por mantener en sus escaños a Josep Lluís Cleries y Assumpció Castellví.

Moncloa exige una Generalitat centrada en la “recuperación económica” La ministra de Industria, Reyes Maroto, exigió ayer que el nuevo Govern esté centrado en la “recuperación económica”, a la vez que lamentó que Catalunya ha estado “ausente” durante “mucho tiempo”, incluso antes de que el actual Executiu se encontrara en funciones. En declaraciones a La2, denunció que el Gabinete español se encontró “prácticamente solo con la empresa y los sindicatos” durante la crisis de Nissan. “Necesitamos claramente un Govern comprometido que piense en Catalunya pero que piense que Catalunya está dentro de España”, sentenció.

Por su parte, David Cid, portavoz de los comunes en el Parlament, avisó a los republicanos de que, si aspiran a formar un Govern que no esté “tutelado”, deben dejar de lado a JxCat y buscar alianzas alternativas.

“Lo que vemos es que JxCat marca los tiempos de la negociación”, manifestó Cid, que no obstante enfatizó que una negociación “basada en ultimátums” no lleva “a ninguna parte”.

El dirigente de En Comú, además, añadió que mantienen vías de contacto abiertas con ERC, pese a que los de Oriol Junqueras ya dejaron claro el lunes que no pactarían con los comunes para formar Govern. Entretanto, Alejandro Fernández, líder del PP catalán, sostuvo que la reunión independentista en la cárcel de Lledoners no es más que una “escenficiación” para que se sepa “quien manda”.

En paralelo, Xavier Pellicer, diputado de la CUP, lamentó que ERC y JxCat “sigan encallados en despachos, de espaldas a la ciudadanía” y dijo que lo prioritario es poner en marcha la legislatura.