POLÍTICA
Ignacio Garriga, de VOX, vaticina una "legislatura corta" y acusa a Aragonès de querer "fomentar el odio y la confrontación"
Durante su intervención en la sesión de investidura de este viernes
El líder de Vox en el Parlamento, Ignacio Garriga, ha vaticinado una "legislatura corta" y ha acusado al candidato a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, de querer fomentar "el odio y la confrontación" entre catalanes.
Durante su intervención en la sesión de investidura de este viernes, el dirigente ultra ha denunciado que los grupos independentistas han convertido la cámara catalana en un "auténtico circo separatista" y ha asegurado que Catalunya es hoy "menos libre, próspera y segura" y que de aquí unos meses "lo será todavía menos". Garriga ha afirmado que "no habrá cordón sanitario, ni pancartas o códigos de conducta" que los "silencie".
El presidente del grupo parlamentario de Vox ha lamentado que con la investidura de Aragonès "se escribe un nuevo capítulo a la triste historia reciente de nuestra tierra". "
Los problemas reales de los catalanes los importan muy poco, por eso llevan tres meses de negociaciones de 'teatrillo' entre un golpista y uno huido para ver a quién se lleva una parte mayor del botín, nuestra riqueza," ha añadido.
Con respecto al acuerdo de Gobierno entre ERC y Junts, Garriga lo ha calificado como reflejo de la "mafia separatista". En la misma línea, Garriga ha vaticinado que la legislatura "será corta", con "grandes desafíos al orden constitucional" y "acondicionada por leyes para avanzar en sus delirios ideológicos".
El dirigente ultra ha afirmado que su partido actuará como "líder de la oposición" y que exigirá en todo momento el cumplimiento de la Constitución: "Ante su falso derecho de autodeterminación, tendrán fachada el legítimo derecho a la defensa de la nación".
Crisis migratoria en la frontera con Marruecos
El líder de Vox ha empezado su intervención expresando su apoyo al Ejército y a los cuerpos y fuerzas de seguridad españolas, que están "protegiendo" las fronteras de una "invasión dirigida, orquestada y meditada por Marruecos". Después de que en su réplica, Aragonès anunciara que su ejecutivo responderá a la situación de Ceuta y Melilla "acogiendo a los niños que correspondan y sean necesarios", Garriga lo ha acusado de "cómplice de la secuestración de hijos de familias marroquíes". "Donde mejor están está en su país de origen, con su padre y su madre," le ha remachado.