CÁUCASO POLÍTICA
La UE intenta forzar la salida de Lukashenko con nuevas sanciones
Por la represión en el país, como el desvío de un avión para arrestar a un periodista || EEUU, Canadá y Reino Unido se unen a Bruselas en contra del régimen bielorruso
La Unión Europea adoptó ayer la cuarta ronda de sanciones en Bielorrusia que afectará a 78 responsables de la represión continuada del régimen de Alexander Lukashenko, incluyendo los responsables del desvío del vuelo de Ryanair para arrestar al periodista y opositor Roman Protasevich.
En concreto, sobre el desvío aéreo, el bloque europeo añade a su lista negra a siete individuos y una entidad implicadas en el caso. La UE apunta a la cúpula del Ejército y adopta restricciones contra el ministro de Defensa, Viktor Jrenin, y el de Transporte, Alexei Avramenko, además del jefe de Estado Mayor bielorruso, Andrei Gurtsevich, y el comandante de las Fuerzas Aéreas, Igor Golub.
También afectan a Leonid Churo, responsable de la empresa estatal de control de tráfico aéreo, al director de Aviación del ministerio de Transportes, Artem Sikorskiy, y al vicepresidente de la Comisión de Exteriores del la Asamblea Nacional, Oleg Gaidukevich.
Con estas sanciones, la UE quiere mandar una “señal” a los partidarios del régimen de que su apoyo a Lukashenko tendrá un “coste sustancial”, señaló el Consejo en el comunicado donde se detallan las medidas.
Aparte de las extensa lista de sancionados, los Veintisiete ya trabajan para adoptar más sanciones, de corte económico, contra Minsk.
El objetivo de la Unión Europea es asfixiar a sectores que benefician a Alexander Lukashenko, como las exportaciones, una decisión que se prevé respalden los líderes de los Veintisiete en su reunión de esta semana.
Las medidas podrían incluir numerosos sectores como la exportación de energía, materias primas, tabaco y armas, han informado fuentes europeas, que señalan que habrá también restricciones de carácter financiero contra la antigua república soviética.
Estados Unidos, Canadá y Reino Unido se unieron a la Unión Europea y anunciaron nuevas sanciones contra altos cargos del Gobierno del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, y entidades estatales, como respuesta “a los ataques contra los Derechos Humanos”, incluido el reciente caso del avión de Ryanair.