Nuevo choque entre PSOE y PP por las 'piedras' del Tribunal de Cuentas

La causa abierta en el Tribunal de Cuentas contra cuarenta cargos de los ejecutivos de Artur Mas y Carles Puigdemont, a los que el martes se les comunicará la fianza que deberán abonar en relación a un presunto desfalco de dinero de las arcas públicas catalanas para promocionar el procés en el exterior, ha generado un nuevo choque político.

El secretario general del PP, Teodoro García Egea, respondió ayer al ministro de Transportes y secretario de organización del PSOE, José Luis Ábalos, que el viernes defendió que esta causa, en la que están inmersos varios de los presos indultados, es “una piedra en el camino” hacía el diálogo que habrá que sortear, que “los tribunales de justicia son la piedra angular sobre la que se asienta la democracia” y no un “obstáculo”. Al ministro también le contestó el exconseller Josep Rull, que le espetó que si de verdad quiere “despedrar” el camino, la mejor manera es retirando a la Abogacía del Estado del citado proceso.

Ábalos, por su parte, atacó a los populares asegurando que lo que realmente les molesta es que gobierne el PSOE y “encare los problemas”. También dijo sentirse asustado con que el partido busque en el expresidente Jose María Aznar a un “padre espiritual”, ya que, según él, es “el resentimiento y el odio hecho carne”.

Un tribunal sin jueces y con 12 consejeros El Tribunal de Cuentas es un órgano fiscalizador de los presupuestos y de la gestión económica del sector público que depende de las Cortes Generales y examina y comprueba la Cuenta General del Estado. Sus miembros no son jueces, sino doce consejeros nombrados por el Congreso y el Senado. Este Tribunal ya reclamó al Govern de Artur Mas gastos por la consulta del 9-N y el martes ha de dar a conocer la cifra que cree que se defraudó con el referéndum del 1-O.