PANORAMA
El Tribunal de Cuentas reclama 5,42 millones por la acción exterior catalana de 2011 a 2017
Cree que es lo que gastó de forma supuestamente irregular la Generalitat para promocionar el 'procés' en el extranjero || Pide 2,8 millones de euros a Mas y Mas-Colell y 2 millones a Puigdemont y Junqueras
El Tribunal de Cuentas comunicó ayer de manera oficial que reclama 5,42 millones de euros a una cuarentena de exaltos cargos de la Generalitat en concepto de responsabilidad contable por los gastos supuestamente irregulares destinados a promocionar el procés en el extranjero entre los años 2011 y 2017. En un informe de poco más de 500 páginas, este órgano administrativo, cuyos miembros son elegidos por el Congreso y por el Senado, desglosó las partidas gastadas y las atribuyó a cada uno de los dirigentes investigados.
Cada uno de ellos tendrá que hacer frente a la devolución del dinero reclamado de manera solidaria con el resto de personas que resulten responsables de la misma al parecer del Tribunal de Cuentas.. Así las cosas, según esta instancia fiscalizadora, los gastos más importantes efectuados por Catalunya para dar a conocer el procés en el exterior se encuadran en una categoría denominada “actividades de promoción del proceso soberanista”, en la que se incluye un programa de visitas internacionales, y que costó 1,6 millones. También figura en el informe la contratación de la empresa Independent por 1,4 millones o la reclamación de 288.526,86 euros por los gastos de viajes de Artur Mas y Carles Puigdemont al extranjero cuando ostentaban la presidencia de la Generalitat.
Con todo, el Tribunal de Cuentas, que verá cómo el mandato de nueve de sus miembros caduca dentro de unas semanas, fijó en 2,79 millones de euros la responsabilidad contable que han de afrontar Mas y Andreu Mas-Colell, que fue conseller de Economía durante su mandato. Francesc Homs, exconseller de Presidencia y que representa a varios de los investigados por el propio Tribunal de Cuentas, se le atribuye una responsabilidad de más 2,95 millones.
A Raül Romeva, conseller de Exteriores durante el 1-O y que fue indultado la semana pasada, el órgano fiscalizador le reclama cerca de 2,11 millones, mientras que a Puigdemont y a Oriol Junqueras, que también ha sido indultado, cerca de 2 millones a cada uno. Sin embargo, los exaltos cargos de la administración catalana que se enfrentan a sanciones más elevadas son Albert Royo, exsecretario general del Diplocat, al que se le piden 3,6 millones de euros, y Mireia Vidal, exinterventora, a la que se le exige el pago de 3,16 millones.
Igualmente, respecto del leridano Ramon Font, que fue delegado de la Generalitat en Portugal, el Tribunal de Cuentas ha fijado su responsabilidad contable en 12.300 euros..
El órgano lleva más de dos años indagando en gastos que supuestamente se usaron para el ‘procés’
Con la comunicación de este informe a las defensas de los investigados, el Tribunal de Cuentas dio por cerrada la fase de instrucción de esta causa, que abrió a finales de marzo 2019. Representantes de los 42 señalados por los gastos supuestamente irregulares presentaron ayer mismo alegaciones, a la espera de que ahora, en la fase de enjuiciamiento, se determine la cantidad que ha de afrontar cada uno de los exdirigentes catalanes. La responsabilidad de cada uno en las partidas correspondientes es solidaria, por lo que todos los deudores de cada una de las mismas tienen la obligación común de hacerse cargo de su totalidad, hasta cubrirla.El PP confía en que los investigados devuelvan “hasta el último céntimo”Independentistas y comunes arremetieron ayer contra la labor del Tribunal de Cuentas y tanto Carles Puigdemont, ahora eurodiputado de JxCat, como la republicana Laura Vilagrà, consellera de la Presidencia, coincidieron en comparar a este órgano fiscalizador con la Inquisición. “Franquismo de fondo y forma”, añadió Puigdemont, mientras que Artur Mas denunció que el Estado “busca la muerte civil y política” de los exdirigentes de la Generalitat encausados.
Oriol Junqueras, por su parte, censuró que “la represión se abalance” ya no sólo sobre los líderes del independentismo sino también sobre sus propias familas. Entretanto, Patrícia Plaja, portavoz del Govern catalán, dijo que los letrados de la Generalitat trabajan para “minimizar el impacto” de las cantidades reclamadas por el Tribunal de Cuentas.
Por su parte, Jéssica Albiach, líder de En Comú en el Parlament, explicó que trabajan en una propuesta en el Congreso para “despolitizar” este órgano fiscalizador.. El independentismo critica que vuelva “la Inquisición” Lorena Roldán, exlíder de Cs en el Parlament y ahora diputada del PP en la Cámara catalana, exigió ayer que los investigados por el Tribunal de Cuentas devuelvan “hasta el último céntimo” del dinero presuntamente malgastado en la promoción exterior del procés. “Es dinero de todos los catalanes”, advirtió.
En la misma línea, Cuca Gamarra, portavoz de los populares en el Congreso, manifestó que es una “vergüenza” el “asedio del sanchismo” al órgano fiscalizador y reclamó que se le deje actuar “con independencia”. Mientras, Carlos Carrizosa, dirigente de Cs en Catalunya, lamentó las “presiones” del independentismo al Tribunal de Cuentas.