POLÍTICA INSTITUCIONES
Sánchez defiende la monarquía en el año de la marcha del emérito
Sin entrar a valorar un posible regreso de Juan Carlos desde los Emiratos || Corinna Larsen pide al anterior rey que le indemnice por terapias de salud mental
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y Felipe VI despacharon ayer en el Palacio de Marivent, en Palma, en una cita que se repite cada año en la residencia vacacional de los monarcas.
Ante el rey, Sánchez destacó que España ha cambiado “afortunadamente mejor” a lo largo de este año y reafirmó su compromiso con la Corona como “institución constitucional”. Por otro lado, rechazó pronunciarse sobre un posible regreso de Juan Carlos I a España.
El monarca emérito hace un año que vive en los Emiratos Árabes Unidos para intentar distanciar las sospechas de corrupción que se ciernen sobre sus negocios de la labor que desempeña ahora su hijo al frente de la jefatura del Estado..
Así las cosas, Sánchez pasó cerca de 90 minutos reunido con Felipe VI y le explicó que la situación que atraviesa ahora España es “muy distinta” a la de hace un año.
“Las cosas han cambiado afortunadamente a mejor”, sostuvo Sánchez, que también aprovechó su visita a la isla de Mallorca para verse con la socialista Francina Armengol, presidenta balear. El también secretario general del PSOE, asimismo, rompió una lanza en favor de la monarquía en tanto que “institución constitucional”.
Preguntado sobre una eventual vuelta del rey emérito, evitó pronunciarse al respecto pero dejó claro que apoya a la Corona.
“Lo que no cambia es nuestro compromiso con las instituciones constitucionales”, remarcó, y loó el papel de Felipe VI como jefe del Estado. Y es que en las últimas semanas se han intensificado los rumores sobre el regreso inminente de Juan Carlos I a España.
El ahora emérito, que ocupó el trono español entre 1975 y 2014, se trasladó a principios de agosto del año pasado a los Emiratos Árabes Unidos, país en el que permanece, por sus supuestas corruptelas.
Mientras tanto, Corinna zu Sayn-Wittgenstein, que fue allegada de Juan Carlos I hasta hace una década, ha presentado ante la High Court de londres una demanda en la que exige al padre de Felipe VI que le indemnice por las terapias de salud mental a las que se ha tenido que someter y por los gastos en seguridad privada que tuvo que afrontar ante el “acoso” del emérito.