El sur de Catalunya, anegado

Un frente de fuertes lluvias torrenciales, que llegaron a descargar 77 litros de agua por metro cuadrado en tan solo media hora, causó ayer graves inundaciones en las comarcas del Montsià y el Baix Ebre, en Tarragona, y también en la zona norte de Castelló, en la Comunitat Valenciana.

La borrasca provocó inundaciones en bajos y calles, que se convirtieron en ríos que arrestaban vehículos, sillas, mesas y mobiliario urbano hasta llegar al mar. Las poblaciones más castigadas en el sur de Catalunya fueron las de Alcanar, donde una cincuentena de vecinos tuvieron que ser desalojados de sus casas al verse afectadas por la lluvia y donde los Bomberos tuvieron que desalojar a una setentena de clientes del camping Alfacs, Sant Carles de la Ràpita y Ulldecona.

La intensidad de la tormenta, que afortunadamente no provocó daños personales, también obligó a cortar la carretera N-340 entre Amposta y Alcanar, la autopista AP-7 a la altura de Ulldecona en dirección Tarragona, que fue abierta horas después, y la vía TP-3318 también en Ulldecona. Asimismo se interrumpió la circulación de trenes entre L’Aldea y Tortosa. Hasta las 18.00 horas de la tarde de ayer los servicios de emergencias habían atendido más de 600 llamadas por incidentes provocados por las inclemencias del tiempo. Entre otras actuaciones los Mossos d’Esquadra rescataron a dos personas y a un perro que habían quedado atrapados en su coche en un tramo inundado de un camino adyacente a la AP-7, donde los agentes accedieron a nado. Debido a esta situación, y a que se espera que las fuertes lluvias puedan continuar hoy, Protección Civil pidió a los ciudadanos de las zonas afectadas que eviten en la medida de lo posible salir de casa, la movilidad a pie y en vehículo y que no bajen a los parkings de las viviendas.

En Vinaròs (Castelló), el aguacero también inundó calles y bajos y provocó que se desprendiera el barranco del Triador, atrapando a una veintena de personas en sus vehículos que tuvieron que ser rescatadas por los bomberos.

La depresión aislada en niveles altos (DANA) también descargó fuertes lluvias y más de 9.000 rayos en otros puntos de España como la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León y Navarra.

Entre las incidencias más significativas destaca un rayo que quemó el tejado de una iglesia en Otones de Benjumea de Segovia, la caída de parte del tejado de la planta de la empresa Amazon en Illescas (Toledo), inundaciones en diferentes edificaciones y viviendas, caída de árboles y ramas en distintos lugares. Asimismo, se dañó aún más después del paso de Filomena el empedrado de las calles de Toledo y las balsas de agua formadas en diversas vías provocó el corte de varias carreteras.

En Madrid quedó interrumpido el servicio en el Metro y se cortó la circulación en algunos túneles, lo que provocó la intensificación de los habituales atascos en la capital española.

Las lluvias y tormentas continuarán hoy en España, poniendo en aviso a 28 provincias, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Además se espera que algunas zonas puedan llegar acompañadas de granizo.