Lituania, Suiza y Bélgica rechazan extraditar a Carles Puigdemont

Suiza informó a España en 2018 y 2019 de que rechazaría entregar al expresident Carles Puigdemont si entraba en el país al considerar que los hechos que pesan sobre él en la orden de detención y entrega dictada por el Tribunal Supremo “no constituyen un delito extraditable según el derecho suizo” y que más bien “parecen ser un delito político”.

En este mismo sentido se han pronunciado también países como Bélgica, Lituania, Austria o Alemania, según consta en varios documentos del Supremo y la de la Unidad Oficina Sirene publicados por elMon.cat y Vilaweb. El pronunciamiento de Suiza de 2018 respondería al momento en el que el juez del procés, Pablo Llarena, dictó la primera orden de detención contra él.

En aquella ocasión, el país alpino reclamó a España que presentara “una descripción más precisa de los hechos” que se le atribuyen, al considerar que, con la información facilitada, no se daba la condición de urgencia para su entrega.

La segunda negativa tuvo lugar el día que Supremo dictó la sentencia contra los líderes del 1-O y Llarena emitió una nueva orden de detención. Suiza entonces alegó que “los hechos descritos no constituyen un delito extraditable, según el derecho suizo”, puesto que parecían ser “un delito político”.

Estas negativas dan oxígeno al expresident de cara a la vista del lunes ante el Tribunal de Apelaciones de Cerdeña que debe decidir sobre su extradición.

Ante esta posibilidad, Puigdemont ya ha pedido al Tribunal General de la Unión Europea que le devuelva la inmunidad como eurodiputado..