POLÍTICA PARTIDOS
Lluvia de críticas a Casado por virar a la derecha en la convención del PP
PSOE, ERC y PNV le acusan de estar acercándose cada vez más a los ultraderechistas de Vox || Vilalta denuncia su sed de venganza y su persecución contra Catalunya
El líder del PP, Pablo Casado, en la convención del domingo.
El duro discurso del presidente del PP, Pablo Casado, durante la clausura el domingo de la convención nacional del partido, en la que reafirmó su liderazgo al frente de la formación, recibió ayer una lluvia de críticas de diferentes formaciones políticas por su viraje y su acercamiento a los ideales defendidos por la ultraderecha.
Desde el PSOE, la portavoz del Comité Organizador del 40º Congreso Federal del partido, Eva Granados, opinó que la convención del PP solo le ha servido a Casado para reafirmar a su formación como la “derecha carca escorada en la ultraderecha que dice no a todo” y evidenciar que han renunciado a ser un partido de Estado “para acercarse a Vox”.
Junts acusa a Casado de usar la campaña de Sánchez prometiendo que encarcelará al expresident
En un sentido similar se pronunció también la portavoz de ERC, la leridana Marta Vilalta, que consideró que la “sed de venganza y persecución contra Catalunya” han llevado a los populares “a escorarse hacia la extrema derecha”. Según la republicana, “la derecha más retrógrada nos quiere callados, encarcelados, silenciados, vencidos, pero ya les decimos (a los dirigentes del PP) que no lo conseguirán, por muchas proclamas que hagan en sus convenciones”. Asimismo, Vilalta recordó a Casado que en Catalunya “hay consensos muy amplios”, y no solo sobre la autodeterminación o la amnistía, apuntó, “sino también en la defensa de la lengua catalana”. Por su parte, la vicepresidenta de Junts, Elsa Artadi, acusó al dirigente popular de recuperar argumentos de campaña del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al prometer que traerá al expresident de la Generalitat Carles Puigdemont a España si el PP gobierna.
Desde el PNV le acusaron de “bravucón” y de estar acercándose a las políticas de la derecha más radical y Ciudadanos cargó contra que se erigiera como la “única alternativa” y aseguró que de lo que es hora es “de una alternativa liberal, de reformas, que no divida a los españoles entre rojos y azules”.
