Villarejo afirma en el inicio de su juicio que le tratan como “un enemigo al que aniquilar”

El excomisario José Manuel Villarejo afirmó ayer ante la Audiencia Nacional, que ayer comenzó a juzgarlo por tres presuntos casos de espionaje, que se le ha tratado como “un enemigo al que hay que aniquilar”.

“En este país cuando alguien molesta, se le aniquila, se le destruye”, sostuvo, y aseguró que a él se le quiere silenciar judicialmente. A la entrada de la primera vista oral por el denominado caso Tándem, donde se enjuiciarán tres piezas -Iron, Land y Pintor- , Villarejo, que ejerce como codefensor, aseguró que “en absoluto” ha usado medios de la Policía Nacional para sus negocios privados e indicó que “jamás” llegará a un acuerdo con la Fiscalía, como sí han hecho otros acusados.

Dijo confiar en la independencia judicial pese a “las presiones” que aseguró que han sufrido algunos jueces y dijo espera que “no sea una Justicia folclórica”.

Por las piezas Pintor, Iron y Land, la Fiscalía pide 110 años de cárcel por pertenencia a organización criminal, espionaje, extorsión y chantaje, entre otros delitos..

La primera jornada, centrada en las cuestiones previas, comenzó con el intento de varias defensas de aplazar el juicio.

Argumentaron que venían “a ciegas” porque no habían tenido acceso a toda la causa, incluidas las agendas que se intervinieron al excomisario y que han nutrido buena parte de las investigaciones del caso Tándem. No obstante, el tribunal rechazó aplazar la vista al estimar que los letrados tienen tiempo “de sobra” para consultar la información que reclaman.

Sin embargo, las defensas no han sido las únicas que han visto sus peticiones desestimadas.

También la Fiscalía Anticorrupción intentó sin éxito incorporar al juicio nueva documentación que avalaría, en su opinión, los indicios para acordar algunos registros practicados en la causa.En la pieza denominada Iron se investiga si el bufete de abogados Herrero y Asociados contrató a Villarejo con la finalidad de espiar un despacho de la competencia. El caso Land deberá aclarar si la empresaria Susana García-Cereceda, propietaria de una urbanización de lujo en Madrid, contrató al excomisario para espiar a sus hermanos, con quien se disputaba una herencia.

Y en el caso Pintor, se busca dilucidar si el empresario Juan Muñoz lo contrató para que extrajera información reservada con la que quería extorsionar un antiguo socio por una deuda.

Junto a él, otras 27 personas físicas y cinco jurídicas se sentarán en el banquillo..

El espionaje al extesorero del PP

El excomisario José Manuel Villarejo está implicado en una treintena de causas. Una de las más relevantes es el caso Kitchen, donde se le investiga por espiar al extesorero del PP ,Luis Bárcenas, para sustraerle información sensible sobre el partido. En esta causa, pendiente de juicio, también está imputado el exministro del Interior Jorge Fernandez Díaz.

El robo a una asesora de Unidas Podemos

En el caso Dina, el excomisario Jose Manuel Villarejo está acusado de robarle la tarjeta del teléfono móvil a Dina Bousselham, una exasesora de Podemos, para obtener información interna de la formación.

Vigilancia a grandes empresarios

En el caso Sacyr se acusa al excomisario de espiar al expresidente de la constructora Sacyr, Luis del Rivero, por encargo de Isidre Fainé y Antoni Brufau.