ERC llega a un acuerdo con el gobierno de Sánchez por "blindar" el catalán y no presenta enmienda a la totalidad a los PGE

La ejecutiva de ERC ha decidido finalmente no presentar una enmienda a la totalidad contra los presupuestos generales del Estado (PGE) para el 2022 fruto de un acuerdo con el gobierno español para "blindar con cuotas el catalán a la Ley Audiovisual".

El acuerdo ha llegado después de semanas de negociaciones y negativas del gobierno español, y se ha certificado sólo minutos antes de que expirara el plazo de presentación de la enmienda.

La decisión de ERC de no presentar la enmienda a la totalidad allana el camino de los presupuestos en el Congreso. El jueves se votarán las enmiendas a la totalidad del PP, Vox, Juntos y la CUP, entre otros, y previsiblemente el gobierno español dispondrá de bastantes apoyos para salvar el trámite.

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha explicado que el ejecutivo español se ha comprometido a cumplir todas las cuestiones pendientes y a fijar una cuota para el sector audiovisual en catalán "antes del 31 de diciembre". No ha aclarado cuál será el porcentaje.

Con respecto a los incumplimientos, ha explicado que en tema de becas habrá "una transferencia inmediata de 18 millones de euros". Además, se seguirá trabajando para el traspaso de la gestión del Ingreso Mínimo Vital .Rufián ha explicado que el acuerdo corresponde sólo a la "primera fase" de la negociación, la de la tramitación de las cuentas. Después ERC abordará con el gobierno español "reivindicaciones sociales muy fáciles de asumir por un ejecutivo progresista".

La decisión de ERC allana el camino de los presupuestos. El PNV ya ha anunciado que votará en contra de las enmiendas después de que los nacionalistas vascos y el gobierno español hayan asumido un acuerdo para el traspaso al gobierno vasco de la gestión íntegra del Ingreso Mínimo Vital (IMV). Bildu tampoco presenta enmienda a la totalidad para "dar continuidad a las conversaciones de las últimas semanas", y podría votar en contra de las enmiendas del resto de formaciones.

De esta manera, el gobierno español tendría bastantes con el apoyo de sus socios, ERC, el PDeCAT, PNV y Bildu para sumar 190 votos (120 del PSOE, 35 de Podem, 13 de ERC, 4 del PDeCAT, 6 del PNV, 5 de Bildu, 2 de Más País, 1 de NC, 1 del BNG, 1 del PRC, 1 de Teruel Existe, y 1 de Compromiso) y superar el trámite.Por el contrario, la ejecutiva de Juntos decidió presentarla aduciendo que hoy en día defender los presupuestos generales del Estado supone "votar a favor que a Catalunya sólo llegue la mitad de lo que estaba presupuestado". El Estado -ha dicho la portavoz de Juntos, Míriam Nogueras- está "apalancat en el inmovilismo", y Juntos no está dispuesto al hecho que "tome el pelo un año más" en Catalunya, en palabras del portavoz de Juntos en el Senado, Josep Lluís Cleries.

La CUP también decidió finalmente este jueves presentar una enmienda a la totalidad de las cuentas. Aunque en un principio había declinado esta posibilidad, los anticapitalistas han presentado un texto que reclama el referéndum, la amnistía y políticas para un reparto más justo de la riqueza. La decisión, afirmó este jueves la CUP, es fruto de la desconfianza con respecto al papel de ERC y de Juntos en esta negociación.

Por el contrario, el PDeCAT ya hace semanas que descartó una enmienda a la totalidad. El 18 de octubre el portavoz del PDeCAT, Marc Solsona, anunció el acuerdo de la Dirección Ejecutiva Nacional del partido de no presentarla para trabajar en una vía "constructiva, de diálogo, de búsqueda de lo mejor para el país y de no hacer un frontismo estéril que no aporta nada". El PDeCAT apuesta por "no cerrar ninguna vía de negociación, pacto, diálogo o cualquier mejora para Catalunya".

Una semana más de negociación

Las enmiendas a la totalidad se votarán conjuntamente con las del PP, Vox y Cs el próximo jueves 4 de noviembre. Será una única votación en que las formaciones tendrán que decidir si aprueban o no el conjunto de los vetos, sin matices con respecto a los textos presentados.Antes de la votación, sin embargo, hay un debate que empieza un día antes, el miércoles, 3 de noviembre, a las 12h, con la presentación del proyecto de ley por parte de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

A partir de las 15h intervendrán los grupos que han presentado enmiendas a la totalidad y después los portavoces del resto de formaciones.El debate continuará jueves 4 de noviembre a las 09h con las intervenciones de los grupos que todavía no hayan hablado, y cuando acabe el debate la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, llamará a la votación. Los grupos tienen la posibilidad de retirar las enmiendas hasta el momento antes de la votación, hecho que deja todavía casi una semana de margen para la negociación.

Mayoría simple

El gobierno español necesita una mayoría simple en esta votación para poder rechazar las enmiendas a la totalidad. Eso pasa indefectiblemente por el apoyo de sus socios tradicionales, especialmente ERC y PNV, una vez Cs se ha desmarcado de cualquier posibilidad de dar apoyo a las cuentas. Si las enmiendas a la totalidad son rechazadas, los presupuestos continuarán su tramitación. En caso contrario caerán y el gobierno español se verá obligado a prorrogar los presupuestos del 2021.

Trámite parlamentario

Si los presupuestos superan la votación del jueves, se abre un proceso de tramitación al Congreso. En primer lugar las cuentas se debatirán en ponencia a la Comisión de Presupuestos, que tiene hasta el 12 de noviembre para aprobar un informe.

Después la misma Comisión de Presupuestos debatirá el informe y las enmiendas al articulado que queden vivías y elaborará un dictamen antes del 19 de noviembre.El dictamen llegará al pleno del Congreso entre el 22 y el 25 de noviembre. Los ministros presentarán sus partidas y se debatirán las enmiendas al articulado y las secciones que no se hayan incorporado a las fases anteriores y que los grupos hayan pedido mantener vivas.

Una vez acabado el debate, el pleno votará sección por sección, y si alguna de las secciones cae por mayoría simple, caen todos los presupuestos. Si todas consiguen el visto bueno de la cámara, los presupuestos quedan aprobados en el Congreso y pasan al Senado.Si en el Senado no reciben ninguna modificación, quedarán definitivamente aprobados, pero si reciben algún cambio el texto volverá al Congreso, que puede aprobar el cambio o rechazarlo y dejar las cuentas tal como salieron de la cámara baja.