ECONOMÍA POLÍTICA
El Govern aprieta a la CUP para que ayude a aprobar los presupuestos
Los negociarán hasta el final pero dudan de unas cuentas que pueden tener el aval del PSC|| El Parlament tumba la petición de Cs para reconsiderar su tramitación
El Govern sigue tratando de recabar la ayuda de la CUP para tratar de tirar adelante los presupuestos, aunque la formación anticapitalista duda, por ahora, de que pueda votar a favor de ellos. El conseller de Economía, Jaume Giró, aseguró ayer que centrará todos sus esfuerzos en llegar a un acuerdo lo más pronto posible para que los cupaires voten a favor de las nuevas cuentas o, por lo menos se abstenga, para permitir que estas pasen su primer trámite parlamentario. Giró insistió que el principal objetivo es “aprovechar el 52% independentista del Parlament” para sacar adelante los presupuestos, pero advirtió que si esto no es posible “buscaran alternativas”.
Los anticapitalistas, por su parte, aseguraron que su principal intención es llegar a un buen pacto para “poder aprobar o abstenerse en la votación, porque es lo mejor que pasaría o que tiene que pasar” en Catalunya. Con todo, afirmaron tener dudas sobre que este acuerdo vaya a llegar, ya que no creen que los presupuestos hayan dado el “giro a la izquierda” que reclamaban. En este sentido se preguntaron que es lo que tienen para que el PSC se haya ofrecido en innumerables ocasiones a apoyarlas.
Asimismo explicaron que la militancia será la tenga la última palabra respecto a si la formación presenta o no una enmienda a la totalidad, aunque no consideran que esta ponga vaya a poner en riesgo el pacto de investidura.Los que sí que enmendarán los presupuestos en su totalidad serán los comuns, siempre y cuando el president, Pere Aragonès, no levante el teléfono y les llame para negociar con ellos su apoyo. Así lo aseguró ayer la líder de la formación en el Parlament, Jéssica Albiach. Sobre las enmiendas, el PSC dijo que esperarán hasta el último momento para ver qué decisión tomar.
Por otro lado, Ciudadanos intentó frenar la tramitación de los presupuestos presentando una petición de reconsideración al acuerdo de la Mesa del Parlament sobre su admisión a trámite, asegurando que varias partidas no se ajustan a la Constitución. Su intentona no duró mucho, puesto que la Mesa tumbó su petición. Tras el rechazo, el partido aseguró que sopesa llevar las cuentas al Consell de Garanties Estatutàries.