Demócratas reclama a Aragonès que descarte un acuerdo presupuestario con los comunes: "No los blanqueamos"

El líder de Demócratas, Antoni Castellà, ha reclamado al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que descarte un acuerdo presupuestario con los comunes. "Pido a Aragonès que no abra ningún debate y menos con los comunes. No los blanqueemos ya que son exactamente el mismo 155 y, en estos momentos, están en el lado de la represión", ha afirmado Castellano este sábado ante el consejo nacional del partido en Lleida. De hecho, el líder de Demócratas ha reiterado que el único pacto "posible y deseable" para las cuentas del Gobierno es entre Juntos, ERC y la CUP. "No puede haber ningún otro escenario, no nos podemos permitir ningún otro escenario", ha reflexionado en voz alta Castellano, que ha solicitado "generosidad" entre las tres formaciones independentistas.

"El modelo que defiende Demócratas desde el punto de vista económico, de vivienda, de conocimiento y de sanidad está lejos, muy lejos del modelo de la CUP", ha reconocido al líder de Demócratas. "Pero no estamos en una situación normal de país. Y por eso, y hasta que no seamos un estado independiente, pedimos generosidad y flexibilidad a todos los partidos, desde Demócratas a la CUP", ha apuntado Castellano. "Hacen falta unos presupuestos de las fuerzas independentistas", ha insistido el líder de Demócratas, en que igualmente ha exigido al independentismo que deje de competir "por la hegemonía". "Bastante de competir electoralmente con la estrategia independentista. La estrategia se tiene que pactar y competir con ella", ha lanzado Castellano. Finalmente, el líder de Demócratas ha renegado una vez más del diálogo con el Estado. "Se ha demostrado empíricamente que es un fracaso. Llevamos cuatro años seguidos probando esta especie de diálogo y la reacción del Estado siempre es más represión", ha recordado Castellano. "Y que nadie utilice los indultos ya que sólo son fruto de la presión europea. Que cargos electos estuvieran en la prisión les era profundamente incómodo", ha concluido el líder de Demócratas.