ECONOMÍA POLÍTICA
La CUP ve insuficientes los pasos del Govern y mantiene la enmienda total a las cuentas
Creen que no queda margen para seguir negociando y señalan que esto es un toque de atención a Aragonès || La aprobación de los presupuestos depende ahora de un acuerdo con los 'comuns'
La CUP decidió ayer mantener la enmienda a la totalidad a los presupuestos de la Generalitat para 2022 al considerar “insuficientes” las cesiones del Govern en materia de vivienda, fiscalidad y procés.La diputada cupaire, Eulàlia Reguant, explicó que la coordinadora abierta parlamentaria del partido ha decidido decantarse por esta opción debido a que la última propuesta lanzada por el Executiu catalán no da “ese giro a la izquierda” ni hacia la defensa de los derechos sociales que ellos pedían, sino que siguen apostando por el “continuismo” y por el “apoyo a macroproyectos” como el del Hard Rock. “No nos abstendremos el lunes, votaremos a favor de la enmienda”, aseguró Reguant, que dijo que no cree posible que antes del lunes puedan llegar a un entendimiento. Con todo, los anticapitalistas dejaron claro que esta decisión no significa el fin del pacto de investidura y señalaron que la enmienda también quiere servir para darle un toque de atención al Govern de Pere Aragonès.
Y es que los anticapitalistas acusan al republicano de no haber cumplido las cuatro revoluciones –la social, la feminista, la ecologista y la democrática– que prometió para ser investido y de haber “normalizado la relación con el Estado y el PSOE” en lugar de apostar por un “embate democrático” para avanzar hacia la independencia.
A pocas horas de que las cuentas se sometan a su primera votación, el Govern no tiene apoyos necesarios
La posición de la CUP deja, de momento, en el aire el futuro de las cuentas a solo unas horas de que el Parlament deba decidir si continúan la tramitación parlamentaria o las tumba. Además, cierra casi por completo la puerta a la opción que el Govern quería explorar de forma prioritaria, la de tirarlas adelante gracias a la mayoría independentista de la investidura, de modo que el foco se centra ahora en otras dos posibles alternativas, los comuns, con los que continúan las negociaciones, o el PSC, si bien estos dos grupos también han presentado enmiendas a la totalidad. La última propuesta lanzada el viernes por el Govern incluía, entre otras cosas, dos nuevos impuestos sobre fiscalidad verde, aumentar la partida de vivienda hasta los 1.000 millones de euros (algo que exigía la CUP) y el compromiso de estudiar tanto la municipalización de la gestión del agua como los procedimientos sancionadores de la ley de Seguridad Ciudadana.
Además, se ofrecía el compromiso de crear un grupo de trabajo para evaluar la posibilidad de hacer un referéndum durante esta legislatura.
ERC opta por intensificar las negociaciones con los morados
Después de conocerse el veto de la CUP a los presupuestos para 2022, los partidos que forman el Govern se pusieron a buscar fórmulas para sacar adelante lo que consideran las “cuentas más expansivas” de los últimos años. ERC reunió de urgencia a su Ejecutiva para evaluar los pasos que debían tomar ahora, y decidieron intensificar los contactos con los comuns para tratar de recabar su apoyo, teniendo en cuenta que es la última opción con la que cuentan.
Con todo, aseguraron que seguirán trabajando con la CUP para “cumplir con los acuerdos de investidura”. Por su parte, desde Junts lanzaron un aviso al PSC asegurando que una posible abstención o apoyo al presupuesto no “desmontará” la mayoría independentista. El secretario general, Jordi Sànchez, defendió en este sentido su compromiso de “mantener una mayoría clara” del independentismo en el Parlament, aunque la CUP vete las cuentas.