Las aulas afectadas por el fallo del 25% en castellano tendrán un docente de refuerzo

El conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, explicó ayer que los centros que hayan recibido órdenes judiciales de impartir un 25% de la enseñanza en castellano podrán decidir “en función del proyecto metodológico” cómo se desarrollan las clases en los grupos afectados, a los que, avanzó, la Generalitat destinará un profesor más. Cambray dijo que el número de docentes de refuerzo asciende a 35, y se incorporarán después de Navidad para que los centros puedan atender a los alumnos y, a su vez, reducir el “impacto” de los fallos en su proyecto lingüístico. Según expuso, la medida no obligará a que un maestro imparta clases en castellano para los alumnos que lo pidan y el otro lo haga en catalán.

En este sentido, aclaró que “las escuelas nunca separarán a los alumnos”, y aseguró que los centros “no identificarán a los escolares”.Por su parte, la portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, manifestó que “si esas decisiones vienen a dar cumplimiento a las leyes y a las sentencias, bienvenidas sean”, y aseguró que el Ejecutivo “respeta a todas las autonomías”.Estas declaraciones llegan después de que el president de la Generalitat, Pere Aragonès, anunciase el jueves un paquete de medidas para blindar la inmersión lingüística en los centros eduactivos de Catalunya, entre las cuales se incluye el incremento de las inspecciones y la aprobación de un nuevo marco legislativo para hacer frente a la “ofensiva judicial, mediática y política” y “preservar el proyecto lingüístico de los centros”.En otro orden de cosas, Barcelona acoge hoy una manifestación en defensa de la inmersión lingüística. La concentración, convocada por la plataforma Som Escola, contará con la participación de Aragonès y miembros del Govern, ERC, Junts, los comuns y la CUP, así como la ANC. No intervendrá, sin embargo, el PSC, que celebra su Congreso Extraordinario (véase la página 22).

Casado: “No dejan ir al baño a los niños porque hablan castellano”El presidente del PP, Pablo Casado, dijo ayer que en Catalunya “hay profesores con instrucciones de no dejar ir al baño a niños porque hablan castellano”, y aseguró que “a los hijos de policías y guardias civiles se les señala y se dice que no pueden estar integrados”. Horas después, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, anunció que los servicios jurídicos de la Generalitat están estudiando estas declaraciones. Aragonès añadió que defenderán “la verdad y al profesorado de ataques indecentes”.

Quim Torra tachó a Casado de “tros de quòniam”.