El gobierno español cierra el acuerdo por la reforma laboral con el aval de la CEOE, la UGT y CCOO
El pacto llega después de nueve meses y medio de negociaciones con los agentes sociales
Pacto por la reforma laboral. El ministerio de Trabajo de la vicepresidenta Yolanda Díaz ha conseguido este jueves cerrar un acuerdo con la patronal y los sindicatos por la reforma laboral. Después de nueve meses y medio de negociaciones con los agentes sociales, la CEOE, la UGT y CCOO han dado su visto bueno al documento pactado, y permitirán impulsar los cambios necesarios para tumbar partes de la normativa aprobada por el PP en el 2012. La previsión del ejecutivo español es aprobar el acuerdo alcanzado con patronal y sindicatos en el Consejo de Ministros del próximo martes, 28 de diciembre, que se espera que sea el último de 2021.
El ministerio de Trabajo ha destacado que el acuerdo es "una gran reforma estructural del mercado de trabajo" y que, por primera vez, se alcanza con un apoyo "unánime de los agentes sociales".
"La reforma aborda los principales problemas del mercado de trabajo español, singularmente la temporalidad, con la simplificación de los contratos reanudando la causalidad, incrementando las sanciones para el uso irregular y fomentando la estabilidad del trabajo, con un cambio de paradigma en la formación para trabajadores," afirma el ministerio liderado por Díaz.
Además, afirma que es una "respuesta conjunta" para dotar las relaciones laborales "de un nuevo marco jurídicamente seguro, avanzado, que aproxima a Europa y con vocación de perdurar en el tiempo."
Los grandes ejes del acuerdo
La reforma laboral propuesta "generaliza" el contrato indefinido y limita los contratos temporales a dos tipos: uno estructural y otro de formativo. El estructural podrá tener dos causas, por motivos de producción o para sustituir a otro trabajador.
En el caso de circunstancias de producción, habrá que acreditar incrementos ocasionales de la producción u oscilaciones de la demanda, y tendrá un tiempo máximo de seis meses, ampliables a un año por convenio colectivo sectorial. También se podrá firmar un contrato temporal de este tipo en periodos como la campaña de navidad, o la del campo, con una limitación de 90 días el año, no consecutivos. Con respecto al contrato temporal de sustitución, se hará para llenar a otro trabajador, que se tendrá que especificar "claramente".
Por otra parte, el acuerdo prevé reducir el tiempo de encadenamiento de contratos para poder considerar a una persona como un trabajador fijo. Así, se pasará de los 24 meses en un periodo de 30, a 18 meses en un periodo de 24.
Con respecto al contrato de formación, podrá ser de dos tipos: contrato de formación en alternancia (trabajo y formación) y contrato por la adquisición de la práctica profesional. En el primer caso, estará limitado fines a los 30 años, e irá de un mínimo de tres meses a un máximo de 2 años. En el caso del contrato por adquisición de la práctica profesional, se tendrá que hacer en los tres años desde la formación, con un periodo mínimo de seis meses y un máximo de 12. Cada convenio detallará qué tipo de actividades y grupos profesionales podrán adoptar este tipo de contrato de formación.
Por otra parte, el acuerdo también prevé fomentar el contrato del fijo discontinuo para trabajos o actividades de temporada.
Convenio del sector vs convenio de empresa
Según el preacuerdo entre las tres partes, prevalecerá el convenio del sector por encima del convenio de la empresa. Este último, podrá regular la elección entre pagar o compensar las horas extra, el horario y distribución del tiempo de trabajo, la adaptación de la clasificación profesional y las medidas de conciliación familiar.
Por otra parte, se recupera el concepto de además de actividad llena, del artículo 86 del Estatuto de los Trabajadores. Así, los convenios colectivos se prorrogarán hasta que haya de nuevo, y la ultra actividad no tendrá límites temporales. Con la reforma del PP, se limitaba a un año y, en caso de falta de acuerdo, el convenio se suspendía.
Los ERTO se potencian
Otro de los elementos destacados de la reforma es que se potencian los ERTO en detrimento de los despidos colectivos (ERE). Así, se incorporan a la legislación ordinaria el ERTO por|para limitación e impedimento –muy utilizados durante la pandemia. Cuando una empresa tenga vigente un ERTO, como ya pasa ahora, no se podrán hacer horas extra, ni subcontrataciones ni nuevos contratos.
El Estatuto de los Trabajadores incorporará el mecanismo RED, que permitirá, también evitar los ERE con expedientes temporales. Habrá dos tipos: cíclicos y con la duración de un año, para cuando haya una coyuntura macroeconómica que lo aconseje; y de sectoriales, también con la misma duración, pero con la opción de prórrogas de seis meses hasta un máximo de 24.
Este mecanismo se activará si hay un acuerdo previo del consejo de ministros, avalado por una consulta con sindicatos y patronales. Entonces, las empresas podrán pedir adherirse y, una vez aceptado, tendrán beneficios en cotizaciones en la Seguridad Social. Además, si empresas de otros sectores contratan trabajadores de los afectados por un mecanismo RED, también tendrán bonificaciones en la Seguridad Social.
Nueve meses y medio de negociación
La negociación de la reforma laboral se ha cerrado nueve meses y medio después de que arrancaran las conversaciones del gobierno español con los agentes sociales -el pasado 17 de marzo- y a una semana del vencimiento del plazo acordado con la Comisión Europea para definirla. La modernización del mercado de trabajo está incluida en el plan|plano de recuperación del Estado español como uno de los compromisos que tiene que cumplir para desbloquear la llegada de los fondos europeos.
La previsión del ejecutivo español es aprobar el acuerdo alcanzado con patronal y sindicatos en el Consejo de Ministros del próximo martes, 28 de diciembre, que se espera que sea el último de 2021.
Tensiones dentro del gobierno español
La reforma laboral ha generado tensiones dentro del gobierno español, que se evidenciaron en octubre con reproches cruzados públicamente entre PSOE y Unidas Podemos, que acusó a la vicepresidenta primera, a Nadia Calviño, "de injerencia". La disputa interna acabó con la incorporación de representantes del Ministerio de Asuntos Económicos y de Seguridad Social a las reuniones que hasta aquel momento sólo había pilotado el Ministerio de Trabajo en solitario.
Dudas sobre el aval de la patronal
En las últimas semanas la negociación se había intensificado con reuniones diarias a tres bandas|lados y, finalmente, después de jornadas de reuniones maratonianas se ha desbloqueado. Una de las dudas era si se conseguiría cerrar con el aval de la patronal, que mostraba reticencias con aspectos como la limitación de la temporalidad, y especialmente después de que la CEOE se descolgara en noviembre del acuerdo de reforma de las pensiones.