El Govern se resiste a dar por rota su alianza de legislatura con la CUP

El Govern se resiste a dar por roto el acuerdo de legislatura con la CUP, pero tanto el presidente Pere Aragonès como el líder de ERC, Oriol Junqueras, tampoco ahorran críticas hacia su negativa a aprobar los presupuestos, que salieron adelante el jueves en el Parlament gracias al apoyo de los comuns. Aragonès lamentó el viernes el “no” de la CUP y justificó que el Govern buscara otro aliado para sacar las cuentas adelante. “El país no podía quedar sin presupuestos, que son absolutamente imprescindibles.

Que no sean suficientes para la CUP no significa que no sean buenos para el conjunto de la ciudadanía”, remarcó. Por su parte, el líder de ERC, Oriol Junqueras, lamentó el plante de los anticapitalistas a los presupuestos pese al pacto de investidura que mantenían con ellos y que incluía que Aragonès se sometiera a una cuestión de confianza en dos años. Para Junqueras, el “no” de los cupaires pone de relieve que su confianza en el Govern es nula.

En esta línea, el republicano defendió que la apuesta de su formación pasa por una “vía amplia” que incluía a Junts, CUP y comuns.Por su lado, el conseller de Economía y Hacienda, Jaume Giró, defendió que la mayoría independentista en el Parlament no está “rota”, sino que la ve “llena de salud”, a pesar de la votación en el Parlament. Giró, de JxCat, considera que “la mayoría del 52 %” en votos resultante de los últimos comicios catalanes “no está rota por ninguna parte”, puesto que está convencido de que “si algún día hay un referéndum vinculante” la opción independentista superará ese porcentaje. En este sentido, se mostró convencido de que “pronto”, sin querer entrar en fechas concretas, se llevará a cabo un referéndum “vinculante” y criticó el papel jugado por el rey Felipe VI tras el 1-O de 2017, lo que explica su negativa a compartir actos protocolarios con el jefe del Estado.En otro orden de cosas, Pere Aragonès justificó de nuevo la querella presentada por su Govern contra el líder del PP, Pablo Casado, por sus afirmaciones sobre la presunta discriminación de niños castellanohablantes en las escuelas catalanas: “La mentira no puede quedar impune”.

Los anticapitalistas no se definen ya como socios preferentes El diputado de la CUP Carles Riera aseguró el viernes que tras la aprobación de los presupuestos catalanes el jueves en el Parlament gracias al apoyo de los comuns, con los que el Govern cerró un pacto, ha quedado demostrado que la formación anticapitalista ha dejado de ser el socio preferente del Executiu. En una entrevista en el diario Público, Riera defendió que las pretensiones de la Generalitat están muy alejadas de las de su formación. “El Govern está mucho más cerca de las estrategias de la patronal y de las políticas socioconvergentes que de realizar un giro a la izquierda”, aseveró.

Asimismo, el anticapitalista también cargó contra la firme apuesta del president, Pere Aragonès, por la mesa de diálogo con el Estado. En este sentido afirmó que la CUP “no puede ser cómplice de un Govern que ha renunciado al conflicto con el Estado para ejercer la autodeterminación”.