Sánchez no quiere 'atarse' con una fecha para la mesa de diálogo entre presiones de ERC

El presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, afirmó ayer que la reunión de la mesa de diálogo con Catalunya se celebrará, pero no fijó ninguna fecha para “no atarse”, ni se comprometió a que sea este mes de enero, ya que según afirmó, la prioridad ahora del Ejecutivo es hacer frente a la pandemia y la recuperación económica. En una entrevista en la Cadena Ser y al ser preguntado si sus tiempos son los mismos que los del president, Pere Aragonès, exclamó: “Yo espero que sean los mismos”. Pero insistió en que, “como en todo, en la política hay cosas” que se pueden “condicionar y otras que no”.

Sostuvo que la ciudadanía en Catalunya y en el conjunto de España están anteponiendo cómo se va a gestionar esta emergencia de ómicron, cuándo se va a llegar al pico y se va a empezar a ver una curva de contagios en descenso, si se va a garantizar la seguridad o no de los niños y niñas en la vuelta al colegio o qué pasa con la incapacidad temporal y las bajas que hay en las oficinas. Según Pedro Sánchez, ahora se está en eso, pero añadió: “Honestamente, creo que el Gobierno de España ha mostrado una predisposición a que se celebre esa mesa de diálogo”. Ante la pregunta de si le pone una fecha aproximada, insistió en que “hablarán los equipos” y no quiso dar una fecha alegando que ya “se ata”.

Recalcó que se va a producir esa reunión y que a lo largo de este año se va a tener más de una reunión, con la esperanza de que se puedan “lograr avances”.La secretaria general adjunta y portavoz de ERC, Marta Vilalta, respondió a las palabras de Sánchez pidiendo “constatar avances” y que haya un principio de acuerdo en la próxima reunión de la mesa de diálogo, más allá de cuando se produzca este encuentro, aunque defendió que sea lo más pronto posible. “No queremos contribuir al juego de las fechas”, dijo Vilalta, que sostuvo que lo importante es que en la próxima reunión de la mesa de diálogo haya concreciones y algún principio de acuerdo para evidenciar que la negociación avanza. Considera que el hecho de “que haya concreciones y constatar avances para ver que esto es un camino que se va recorriendo” es más importante que la fecha de la reunión, aunque insistió en que espera que se reúna lo más pronto posible.En este contexto, la vicepresidenta de Junts y diputada en el Parlament Elsa Artadi criticó que el debate sobre la mesa de diálogo se centre en el calendario y no en los contenidos y en los supuestos avances que pueda haber en cuestiones como el derecho a la autodeterminación y una ley de amnistía.

“Hay evidencias acumuladas que demuestran que no hay un compromiso del PSOE, del PSC ni del supuesto Gobierno progresista que forman con los comuns, de resolver el conflicto político. Una mesa de diálogo sin reuniones, no es mesa ni es diálogo”, dijo.

El juez Llarena rechaza ser recusado en el ‘caso procés’

El magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo Pablo Llarena ha presentado un informe en el que rechaza su recusación como instructor de la causa del procés tras la petición, entre otros, del expresident Carles Puigdemont a raíz de que recibiera un premio de la Fundación Villacisneros en noviembre de 2021.

Tanto Puigdemont como los exconsellers Antoni Comín, Lluís Puig y Clara Ponsatí identificaron a esa fundación con políticas contrarias a sus intereses. Llarena rechaza el argumento y recuerda que ha recibido premios de otras instituciones, como la medalla al mérito de la Guardia Urbana de Barcelona, que le entregó en 2011 el entonces alcalde, Xavier Trias, siendo en esa época alcalde de Girona por el mismo partido político Puigdemont, y primer teniente de alcalde de Barcelona, con funciones en el área de Seguridad, Joaquim Forn -uno de los condenados por el procés.En su informe, notificado este lunes a las partes, el juez resalta la doctrina del tribunal sobre imparcialidad judicial, y subraya que en esa materia las “apariencias” son importantes, ya que lo que está en juego es la confianza que los tribunales deben inspirar a los ciudadanos en una sociedad democrática. Pero añade que “ello no significa que deba primar la subjetividad de una de las partes, de modo que para excluir al juez predeterminado por la Ley resulte suficiente con levantar unas sospechas que no resulten objetivamente razonables”.

Piden 9 años de cárcel por una protesta del 1-O

Un manifestante de las protestas del 1-O se enfrenta a 9 años y 3 meses de cárcel en dos causas abiertas por desórdenes públicos, atentado contra la autoridad y delito de lesiones. En el primer juicio, el 18 de enero, piden para Brian Bartés tres años y tres meses de prisión a raíz de la manifestación ante el Camp Nou, en diciembre del 2019, mientras que en un segundo juicio, el día 12 de mayo, el joven se enfrenta a una pena de seis años por la protesta en contra del Consejo de Ministros en 2018 en Barcelona.

Reguant reclama la nulidad del procedimiento por no responder a Vox

La defensa de la diputada de la CUP en el Parlament Eulàlia Reguant ha pedido la nulidad del procedimiento abierto contra ella después de que el Tribunal Supremo (TS) le notificara a finales de diciembre la apertura del juicio oral por un delito de desobediencia grave por negarse a responder en calidad de testigo a las preguntas de Vox, que ejercía la acusación particular durante el juicio del 1-O.

Expone que “ni el Tribunal que ha formulado la instrucción ni la Fiscalía que ha formulado la acusación son competentes en el caso” dada la condición de diputada de Reguant, y por ello consideran que la instrucción debería empezar de nuevo en el Supremo y se deberían declarar nulas todas las actuaciones realizadas hasta el momento. También alega que “no se puede sancionar dos veces por la misma conducta”, teniendo en cuenta que ya fue multada por el caso.