POLÍTICA ECONÓMICA
Ultimátum de Esquerra, CUP, Bildu y BNG para pactar la reforma laboral
Yolanda Díaz confía en llegar a un acuerdo con Esquerra entre críticas de Junts || Pedro Sánchez pide el apoyo del Parlament porque “es buena para los trabajadores”
Esquerra Republicana, EH-Bildu, la CUP y el BNG escenificaron ayer en el Congreso un frente común para reafirmar su rechazo a la reforma laboral en caso de no aceptar el Gobierno negociar cambios y mejoras en el decreto ley acordado con la patronal CEOE y los sindicatos CCOO y UGT. En una declaración conjunta presentada en el Congreso, representantes de las cuatro formaciones expresaron su “absoluta y sincera voluntad para abrir un diálogo y negociación con el Gobierno” y alcanzar un acuerdo para “una reforma laboral ambiciosa, que dé respuesta a las peticiones y expectativas de las personas trabajadoras y cumpla con la palabra dada a la mayoría trabajadora”. A su juicio, la reforma laboral que debe someterse a votación la próxima semana en el Congreso “no constituye la derogación de la reforma laboral del 2012” y, aun valorando medidas incluidas contra la temporalidad y la precariedad, consideran que estas “son totalmente insuficientes para alcanzar el objetivo de restituir los derechos laborales básicos arrebatados”.
Pese a señalar que cada formación es autónoma a la hora de decidir el sentido de voto para la convalidación o derogación del decreto ley el próximo jueves, tanto el portavoz laboral de ERC, Jordi Salvador, como los portavoces de EH-Bildu, Mertxe Aizpurua; la CUP, Mireia Vehí; como el diputado de BNG, Néstor Rego, confirmaron que si el Gobierno no se compromete a realizar cambios en la reforma, su voto será negativo. Entre las propuestas que estas formaciones detallaron está la prevalencia de los convenios autonómicos, exigencia también del PNV aunque no participa en la declaración de los partidos independentistas de ayer, la recuperación de la indemnización de 45 días por despido improcedente y los salarios de tramitación, la vuelta de la autorización administrativa para despidos colectivos o la prioridad total de los convenios de sector sobre los de empresa.Salvador confirmó un “intercambio de propuestas” con la vicepresidenta Yolanda Díaz, quien ayer insistió en que el acuerdo con Esquerra es posible. El secretario general de Junts, Jordi Sànchez, dijo que el Gobierno ha priorizado hasta ahora a ERC como socio parlamentario porque les dan “su apoyo a cambio de poco, y ERC también prefería que las relaciones entre Junts y el Gobierno fueran la mínima expresión”.Por su lado, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, volvió a pedir al Parlamento que convalide la reforma laboral porque “es buena para trabajadores y jóvenes”.