El Parlament mantendrá el escaño de Juvillà mientras no comprometa a los funcionarios

La Comisión del Estatut de los Diputados del Parlament aprobó ayer un dictamen que defiende que el diputado de la CUP por Lleida, Pau Juvillà, inhabilitado por desobediencia, preserve su escaño siempre y cuando no comprometa a los funcionarios de la Cámara catalana, por lo menos hasta que el Tribunal Supremo se pronuncie sobre las medidas cautelares pedidas. Con todo, esto no garantiza, según señaló el diputado de Junts Jaume Alonso-Cuevillas, que presidió la comisión, que pueda seguir ejerciendo sus funciones. El dictamen, elaborado por ERC, Junts y la CUP, contó con su apoyo y el de los comuns.

El acuerdo, que deberá ser ratificado en pleno, llegó a escasas horas de que mañana se cumpla el plazo que fijó la Junta Electoral Central (JEC) para que la presidenta del Parlament, Laura Borràs, ejecute la retirada del acta al cupaire, y defiende que Juvillà no concurre en las causas establecidas por el reglamento para perder su condición de diputado. De todas formas, los tres grupos coinciden en que el límite de la desobediencia a la hora de defender esta postura “pasa por preservar a los funcionarios de cualquier tipo de responsabilidad penal y contable”. Es por esto que los anticapitalistas se ofrecieron a ERC y Junts para presidir el Parlament, función en manos de Borràs, con la intención de hacerse responsable de las consecuencias judiciales que la defensa del diputado leridano de su grupo puedan acarrear.

Hasta ahora, ambos partidos lo han rechazado. El texto también recuerda que el Parlament ya defendió que la JEC no es competente para tomar un acuerdo “que altera la composición de la Cámara”.Con este dictamen se ha ganado tiempo para que Juvillà mantenga su acta, pero, previsiblemente, la acabará perdiendo cuando los funcionarios de la Cámara deban ejecutar la orden de retirada y sustituirlo por la siguiente persona en la lista de la CUP, Nogay Ndiaye.La reunión se produjo después de que la Mesa recomendara detener la actividad de la Cámara hasta que la comisión acordara un nuevo dictamen sobre Juvillà. Esto provocó ayer la paralización de 5 comisiones.

El diputado de la CUP por Lleida y secretario tercero de la Mesa del Parlament, Pau Juvillà, que el lunes comunicó su retirada de la vida política debido a problemas de salud, anunció ayer que padece cáncer. “En los últimos 15 años me han encontrado dos tumores, pero he tenido ‘suerte’: los dos descubrimientos fueron de casualidad y se pudo actuar a tiempo. Hace un mes me encontraron otro y comenzó nuevamente la angustia y la urgencia en las pruebas”, explicó a través de su Twitter el diputado leridano, que hizo un llamamiento a romper el tabú que considera que hay acerca de esta enfermedad.

Juvillà, que manifestó su voluntad de mantenerse animado y fuerte con un “¡Viva la vida!”, explicó que por esta situación faltó a algún pleno del Parlament y a alguna reunión de la Mesa. Afirmó que ha decidido priorizar su salud, ya que en el contexto actual, con el litigio abierto por su inhabilitación y la notificación de la Junta Electoral Central (JEC) para retirarle el escaño, la Mesa requiere de una disponibilidad inmediata, a la que ahora no se “puede comprometer”. La CUP ya ha propuesto que el diputado Carles Riera lo sustituya como secretario tercero.

Juvillà, que acompañó su escrito con una fotografía con el número para una cita médica en el hospital Aranu de Vilanova, puso en valor la calidad de la sanidad pública catalana, que calificó de “magnífica, con profesionalidad y empatía”, y exigió cuidarla, dotarla de más recursos y defenderla.Tras conocerse la noticia muchos de los parlamentarios y también personalidades del mundo de la cultura y la política quisieron transmitir su apoyo al cupaire. Por ejemplo, el vicepresidente de la Diputación de Lleida, Jordi Latorre le escribió un: “Adelante Pau”. También desde Junts, la diputada por Lleida, Cristina Casol: “Mucha suerte, fuerza y lucha siempre!!!”.

Por su parte, la excupaire Mireia Boya le envió un “viva la vida siempre”. También le desearon lo mejor desde Esquerra, el PSC, Cs y PP, pero no Vox.

La oposición pide la inhabilitación y tilda el dictamen de “patraña”

El PSC, Vox, Cs y PP, que votaron en contra del dictamen, acusaron al independentismo de “teatralizar” y “gesticular” con este informe, que calificaron de “patraña” jurídico.

Asimismo reclamaron que se haga efectivo el acuerdo de la Junta Electoral Central y se le retire el acta a Pau Juvillà. El grupo ultra fue más allá y amenazó con acciones penales. Todo esto ante unos partidos independentistas que defendieron la “soberanía del Parlament” y los derechos políticos del diputado cupaire.

Los comuns también defendieron su acta hasta que haya sentencia firme.