ELECCIONES AUTONÓMICAS
PP y PSOE se la juegan en Castilla y León
La comunidad vive hoy unos comicios reñidos y sin mayoría clara || Sánchez y Casado miden sus fuerzas en un mapa que previsiblemente forzará a los grupos a pactar para gobernar la Junta
Un total de 2.094.490 castellanoleoneses están llamados hoy a las urnas para los primeros comicios en la historia de la Comunidad que se desarrollan de forma anticipada y en los que se podrá optar por un centenar de candidaturas. Tras dos semanas de campaña electoral, los ciudadanos vivieron ayer la jornada de reflexión previa a las elecciones, para las que los sondeos prevén una reñida batalla entre izquierda y derecha que dificultará la gobernabilidad de la Junta. A escasas 24 horas para que se abrieran los colegios electorales, la ventaja del PP sobre el PSOE se seguía estrechando según las encuestas, situándose a 11 escaños de la mayoría absoluta (fijada en 41 procuradores), por lo que el candidato “popular”, Alfonso Fernández Mañueco, necesitaría a Vox para revalidar la presidencia de la Junta de Castilla y León.
Además, la mayoría conservadora se ha visto en receso desde el principio de la campaña electoral en la comunidad; ambas formaciones suman ahora 42 diputados, cuando al principio de la serie de predicciones sumaban 45. Respecto a la izquierda, el PSOE de Luis Tudanca, que ganó las elecciones en 2019, retrocedería de forma significativa y no tendría manera de conformar un gobierno alternativo por sí solo. En este escenario, y a falta de saber la representación que obtendrán Ciudadanos y Unidas Podemos –consideradas la tercera y cuarta fuerza política–, se prevén claves los escaños que puedan lograr partidos como Soria Ya, Unión del Pueblo Leonés y Por Ávila, cuya proyección se ha visto en aumento tras las reivindicaciones de la denominada “España vaciada”.De todos modos, la situación política actual en la comunidad se ve reflejada en las encuestas, que durante la campaña han pasado por un sinfín de cambios.
Si bien inicialmente se preveía una nueva mayoría absoluta de Fernández Mañueco, su retroceso respecto al PSOE y el posible reparto de votos entre grupos rompe la hoja de ruta que la cúpula del PP preveía. Tras el éxito del grupo en Madrid en mayo de 2021 –cuando Isabel Díaz Ayuso ganó los comicios a la Asamblea de la capital–, su líder, Pablo Casado, hizo que Mañueco rompiera su relación en la Junta con Cs y convocara elecciones anticipadas para reafirmar su liderazgo en la comunidad y usarlo como catapulta hacia la Moncloa. También se entrevé la voluntad de diluir el “efecto Ayuso” con el mandato de otro líder ‘popular’ en una comunidad para “evitar personalismos”, por lo que el fracaso en las urnas de Fernández Mañueco se vería como un doble varapalo al PP.