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PANORAMA

Guissona recibe a 36 refugiados en un solo día y ya son 75 desde que comenzó la guerra

El ayuntamiento busca hogares de acogida y organiza actividades para integrar a los menores || Siguen las iniciativas solidarias para llevar víveres a la frontera y preparan envíos en Bellpuig y Menàrguens

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Un total de 75 refugiados de Ucrania, 44 adultos y 31 menores, han llegado a Guissona desde que comenzó la guerra, el pasado 24 de febrero. Solo ayer el número de personas acogidas fue de 36 y se suman a las 39 que han llegado desde el comienzo del conflicto bélico. Fueron atendidas en las dependencias municipales y repartidas entre 36 familias de la localidad y la Segarra.

Según el alcalde, Jaume Ars, el consistorio trabaja para localizar familias que acojan a los que lleguen en los próximos días y busca espacios para poder atenderlos. Además, prepara clases de idioma a través de Cáritas y actividades para los niños en la biblioteca para que se familiaricen con la cultura local. Por otra parte, Maksym Demchuk, el conductor voluntario del camión que salió de Guissona el pasado jueves, llegó ayer a la frontera de Polonia con Ucrania con 12 toneladas y media de ropa, mantas, sacos de dormir, material sanitario y alimentos enlatados, recogidos en el locutorio Online de Guissona.

Ars apeló a los vecinos a parar la recogida masiva de víveres, que se centralizará en Lleida, y a hacer donaciones monetarias a las ONG. Además, UGT Guissona CAGSA entregará hoy un donativo al centro oficial del NBU (National Bank of Ukraine) para recaudar fondos para la fuerzas armadas.Por su parte, Jordi Solana, vecino de Bellpuig, impulsa una campaña de recogida de material solidario para llevarlo a Ucrania. Con el lema La Fontana x Ucraïna,’ el copropietario de este bar-restaurante junto con un compañero de Sant Celoni, Marc Badia, emprenderá el próximo domingo un viaje hacia la frontera de Polonia para entregar material a los refugiados ucranianos.

Centra la campaña en los niños porque “no tienen ninguna culpa” de lo que está sucediendo y sufren mucho. En este sentido, pide principalmente ropa, comida y juguetes. Iveco Motortrans de Lleida le cede una furgoneta sin cobrarle el alquiler; Torrons Virginias de Agramunt entrega 30 cajas de turrón; Caramels Pifarré de Bellpuig un palet lleno de golosinas y desde una cooperativa del pueblo le han dado 300 kilos de manzanas.

La recogida de material se hará entre el miércoles y el domingo. Además, está estudiando hacer un segundo viaje para traer refugiados ucranianos al municipio. Mientras, la familia de Vallfogona de Balaguer que el domingo recogió a una madre embarazada y sus cuatro hijos en la frontera prosigue el viaje con la previsión de llegar mañana a Lleida.

Núria Rocaspana señaló que está en conversaciones con el ayuntamiento de Balaguer matricular a los menores en la escuela donde estudian sus hijos. La conselleria de Educación busca una fórmula para adaptar a los niños acogidos al sistema educativo catalán, mientras que la Paeria de Lleida prepara un protocolo único para acoger a las familias. Menàrguens ha fletado también un transporte con material organizado por la comunidad ucraniana y el ayuntamiento.

La caravana con refugiados que conduce una familia de Vallfogona.

La caravana con refugiados que conduce una familia de Vallfogona.N.R.

La caravana con refugiados que conduce una familia de Vallfogona.

La caravana con refugiados que conduce una familia de Vallfogona.N.R.

La caravana con refugiados que conduce una familia de Vallfogona.

La caravana con refugiados que conduce una familia de Vallfogona.N.R.

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