EUROPA DEL ESTE CONFLICTO BÉLICO
Ucrania denuncia “crímenes de guerra” en la ciudad de Bucha por Rusia, que lo niega
El Gobierno de Zelenski dice que las tropas rusas han maniatado y asesinado a civiles y lo califica de “genocidio” || La ONU, Europa y Estados Unidos piden una investigación y anuncian nuevas sanciones
El gobierno ucraniano acusa a Rusia de haber maniatado y asesinado a civiles en la ciudad de Bucha, al noroeste de Kiev. Una acusación que el Gobierno ruso rechazó ayer “tajantemente” y que ha provocado indignación internacional, con los Estados Unidos y la Unión Europea exigiendo una investigación de lo ocurrido y anunciando nuevas sanciones al gobierno de Vladímir Putin. Las primeras informaciones del supuesto asesinato de civiles las hizo uno de los asesores del gobierno ucraniano, Mykhailo Podolyak, que publicó un vídeo en las redes sociales en el que se muestran varios cuerpos en el suelo, uno de ellos con las manos visiblemente atadas a la espalda, en la ciudad de Bucha, que hasta hace unos días estaba bajo control ruso y ahora han recuperado las fuerzas ucranianas después de que Rusia redistribuyera sus tropas para centrar su ofensica en el Donbass, en el este del país. “Los cuerpos de personas con las manos atadas, que han sido asesinadas a tiros por soldados rusos, yacían en las calles. Estas personas civiles no estaban en el Ejército. No tenían armas. No representaban ninguna amenaza. ¿Cuántos casos más están ocurriendo ahora mismo en los territorios ocupados?”, dijo Podolyak.
Por su parte, el presidente ucraniano, Vlodomir Zelenski calificó el caso de “genocidio” y acusó a Rusia de querer “la eliminación de una nación y su pueblo” y dijo que sus tropas han hallado 410 cadáveres en las zonas recuperadas cerca de Kiev.
La respuesta de Rusia no se hizo esperar y ayer su ministerio de Defensa desmintió “tajantemente” las acusaciones de cometer crímenes de guerra en Bucha y en las regiones que están bajo su control. Señalaron que “ni un solo residente local sufrió acciones violentas” mientras “fuerzas ucranianas bombardeaban la ciudad las 24 horas del día con artillería de gran calibre, tanques y sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes”. El ministerio ruso aseguró que “todas las unidades rusas abandonaron por completo la ciudad de Bucha el 30 de marzo” y recordó que, un día después de su marcha, el alcalde “confirmó que no había militares rusos sin mencionar la existencia de residentes acribillados en las calles”.
Ante esta situación, las Naciones Unidas, Estados Unidos y la Unión Europea han pedido una investigación independiente para esclarecer lo ocurrido. A su vez, tanto Europa como Estados Unidos prometieron imponer nuevas sanciones económicas a Rusia.