PANDEMIA JUSTICIA
Investigan un geriátrico de Premià de Mar por homicidio
Fallecieron 87 de sus 200 residentes durante la primera ola de la Covid || Culpan a la exdirección de graves irregularidades
La fachada de la residencia Ca n’Amell de Premià.
El juzgado de instrucción número 2 de Mataró investiga al exdirector y a la exresponsable médica de la residencia Ca n’Amell de Premià de Mar por un caso de homicidio por imprudencia profesional después de que durante los primeros meses de la pandemia provocada por la Covid-19 fallecieran 87 de sus 200 residentes. La investigación se abrió a raíz de una querella presentada por la fiscal jefe de Mataró, que acusaba a los responsables del centro de haber provocado un “sufrimiento gratuito” a los usuarios de la residencia, de haberlos “desatendido” y de no haber tomado ninguna medida para evitar la situación que se desató en el centro durante los meses de marzo y abril de 2020. La Generalitat intervino la residencia el 17 de abril de ese año, cuando el centro ya sumaba 64 muertos, si bien los dos querellados no fueron apartados de su cargo.
El Govern apuntó que se estaban cometiendo una serie de irregularidades y acusaba a la dirección de Ca n’Amell de no cumplirse con la normativa antiCovid, de no garantizar la atención continuada a los pacientes, de errores en la administración de medicación y de tratar los residentes de forma irrespetuosa. El juzgado de instrucción de Tremp también investiga a la dirección de la residencia Fiella de Tremp, donde murieron 64 ancianos. El proceso se encuentra en la fase de interrogatorios de la instrucción judicial.
