PANORAMA
El Govern congela relaciones con Moncloa por el espionaje a líderes independentistas
Puigdemont y Junqueras anuncian acciones judiciales y políticas a todos los niveles || Marc Solsona califica de “ciencia ficción” el caso y cree que es necesario pedir “responsabilidades y explicaciones”
El espionaje a líderes independentistas ha provocado que el Govern congele relaciones políticas con Moncloa hasta que investigue el caso, por una parte, y que Carles Puigdemont y Oriol Junqueras anuncien acciones judiciales y políticas a todos los niveles. Todo mientras el dirigente del PDeCAT, alcalde de Mollerussa y uno de los espiados, Marc Solsona, califica el caso de “ciencia ficción” y cree necesario pedir “responsabilidades y explicaciones”. Por la mañana y desde el Parlamento Europeo, el eurodiputado y expresident, Carles Puigdemont, y el exvicepresident y líder de ERC, Oriol Junqueras, anunciaron acciones legales en España, Francia, Suiza, Luxemburgo y Alemania por el caso del espionaje destapado por la plataforma de ciberseguridad ‘CitizenLab’.
Presentarán querellas, empezando por la empresa tecnológica NSO, en los tribunales en Barcelona, pero también ante la justicia de otros países de la UE donde se han producido los supuestos ciberataques. Puigdemont, además, pidió a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que “actúe urgentemente” y haga rendir cuentas a España. El líder de ERC advirtió que Esquerra será “exigente” con el Ejecutivo de Pedro Sánchez y que debe dar explicaciones porque “tiene responsabilidad de saber si sus órganos usan esto”.
Sobre si afectará a la mesa de negociación, insistió en que el proceso de diálogo es “una herramienta útil” a la que “no va a renunciar”. “Es una bandera que no podemos dársela a quien no la merece. El Estado español no hace méritos para merecerla y no podemos regalársela”, recalcó.Horas más tarde, tras el Consell Executiu, la Generalitat congeló las relaciones con el Gobierno español hasta que investigue al Catalangate.
Lo anunció el president, Pere Aragonès, en una comparecencia en Palau.“La confianza está dañada, y es necesario que el Estado se mueva”, declaró acompañado por el vicepresident, Jordi Puigneró, y todo el Govern. Subrayó que “no se puede recuperar la normalidad de las relaciones políticas” con Madrid, y admitió que es “muy difícil que existan las condiciones para avanzar” en la mesa de diálogo. Aragonés pidió una conversación “cara a cara” con Pedro Sánchez para esclarecer la responsabilidad del Estado con el espionaje.
“Un estado democrático no espía a la ciudadanía, un movimiento democrático, ni escucha las conversaciones privadas de los adversarios políticos de su gobierno”, dijo. Tildó el Catalangate de “auténtica operación de estado” contra el independentismo, y el caso de espionaje “mayor” detectado nunca hasta ahora. Todo ello mientras reclamaba un investigación a Moncloa.
Entretanto, Marc Solsona se puso a disposición de todos los espiados por si es necesario articular ninguna acción conjunta. “Yo me sumaré”, dijo, al tiempo que reconoció que no es nada agradable saber que te han espiado y que el caso corrobora que hace tiempo que el Estado no ha hecho las cosas bien con los independentistas catalanes.
El Ejecutivo de Sánchez descarta una investigación
El Gobierno español “trabaja para restablecer la confianza” con la Generalitat. Es el mensaje que la Moncloa quiso transmitir después de que Pere Aragonès diera por congeladas las relaciones entre ambos ejecutivos mientras Moncloa no haga una investigación interna por el caso Catalangate de espionaje masivo a políticos, agentes de la sociedad civil y abogados catalanes.
El ejecutivo español no contempla por el momento esta investigación, pero recordó que siempre “ha dado muestras de una voluntad clara e inequívoca de diálogo durante todo el mandato”, así como que mantiene además su “apuesta por desjudicializar” el conflicto.
Tras el Consejo de Ministros, la portavoz del Gobierno español, Isabel Rodríguez, había desvinculado el Ejecutivo de Pedro Sánchez del caso y apuntado que, en su caso, “colaborará” con la Justicia, pero no impulsará de motu propio actuaciones para esclarecer los hechos. Horas antes de la comparecencia de Aragonès, la Moncloa daba por hecho que el caso no afectaría a las relaciones con la Generalitat ni tampoco a la mesa de diálogo.
Mientras, ni la Fiscalía ni el Tribunal Supremo han anunciado ningún paso para esclarecer los hechos. La ministra de Defensa, Margarita Robles, de quien depende el CNI, tiene previsto comparecer en el Congreso de los Diputados, pero la Moncloa ya ha advertido de que hay materias “secretas” de las que no va a hablar.
El independentismo se conjura para actuar
El diputado de la CUP Carles Riera acusó a España del espionaje. Compareció en el Parlamento Europeo junto a Carles Puigdemont, Otriol Junqueras y otros líderes independentistas, en representación de los 65 espiados, entre ellos los cuatro últimos presidents de la Generalitat. La líder de la ANC, Elisenda Paluzie, pidió que el independentismo esté “a la altura de los catalanes” con “las acciones” que tomarán en los “próximos días. “Por mucho juego sucio que hagan no podrán acabar con un movimiento pacífico y democrático”, añadió el presidente de Òmnium, Xavier Antich.
Un juez, a la espera de respuestas de Israel
El juez que investiga el presunto espionaje con el software israelí Pegasus todavía espera la respuesta de Israel a las comisiones rogatorias que envió hace un año un y medio, cuando el caso afectó al conseller Roger Torrent y al concejal de ERC en Barcelona Ernest Maragall.
Teléfonos cautivos sin que el dueño se diera cuenta
Un software toma el control del teléfono o dispositivo infectado, en muchas ocasiones sin que la víctima se percate. Es capaz de usarlos como micrófonos, grabar vídeos, leer mensajes o modificar archivos almacenados. En ocasiones, entraba en el dispositivo a través de mensajes de texto que aparentemente procedían de aerolíneas -tras comprar un vuelo- o de Hacienda o la Seguridad Social españolas, con “mensajes muy convincentes” y que en ocasiones contenían datos específicos de la víctima.
La Eurocámara apuesta por investigar el caso
El Europarlamento estudiará casos de espionaje con el programa de Pegasus en países europeos, incluido el de los independentistas catalanes.