POLÍTICA POLÉMICA
Sánchez confía en acercar de nuevo a ERC, pero cierra filas con Robles
Esquerra advierte que, como mínimo, reclama el cese o la dimisión de la ministra de Defensa || Pegasus pudo espiar a más miembros del Ejecutivo central
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confió ayer, a la espera de concretar una próxima reunión con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en que logrará recomponer sus relaciones con ERC y otros socios de investidura para mantener esas mayorías hasta agotar su mandato. Ese fue el mensaje que lanzó ayer el jefe del Gobierno central a los miembros de la Ejecutiva Federal socialista en plena polémica por la escuchas del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) a dirigentes independentistas. En este sentido, el portavoz del PSOE, Felipe Sicilia, aseguró que en el encuentro quedó claro que la directora del CNI tiene el apoyo de quien lo tiene que tener que es la ministra de Defensa, Margarita Robles, que a su vez cuenta con el respaldo de “todo el Gobierno”.
En este contexto, explicó que “a día de hoy no hay ni una sola información y ni una sola razón para que la directora de CNI no siga en su puesto” y precisó que si sigue al frente es porque “hay confianza en el trabajo que está realizando”. Además, en relación con la posibilidad de que el Ejecutivo desclasifique documentos relacionados con el espionaje aseguró que están dispuestos siempre que no afecte a la seguridad nacional y si la Justicia se lo pide. Frente a sus deseos de restablecer la confianza con sus socios, se sucedieron a lo largo del día declaraciones que inciden en que aún está lejos de resolverse el problema y en que hay que asumir responsabilidades.
La portavoz de ERC, Marta Vilalta, exigió “como mínimo” la dimisión o cese urgente de Robles, y advirtió que no se conformarían con la de la directora del CNI, Paz Esteban. También la otra parte del Gobierno de coalición Gobierno, Podemos, insistió en reclamar dimisiones.
Por su parte, el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, retó al presidente del Gobierno a desclasificar los informes de los 18 independentistas que el CNI ha reconocido que fueron espiados con autorización judicial y consideró imposible que Sánchez no supiera nada. El dirigente juntista denunció que su móvil fue atacado con Pegasus en septiembre de 2015, después de haber sido elegido presidente de la ANC.
En otro orden de cosas, el titular del juzgado 21 de Barcelona tiene en sus manos la querella de Òmnium por el presunto espionaje, después de que el juez que investiga los ataques a los móviles de los dirigentes de ERC Roger Torrent y Ernest Maragall haya rechazado quedarse con el caso.El Gobierno informará hoy si, además de los teléfonos de Sánchez, Robres y Fernando Grande-Marlaska, ha habido más espionajes con Pegasus dentro del Consejo de Ministros.