Rusia reducirá la llegada de gas a Alemania

La empresa gasista rusa Gazprom anunció ayer que reducirá un 40% el suministro que envía a través del gasoducto Nord Stream, que conecta Rusia con Alemania, aunque lo atribuye a los retrasos en los arreglos de varios equipos por parte de la firma alemana Siemens. La empresa rusa no aludió a razones políticas para este nuevo recorte, que llega unos días después de que el Kremlin subrayase que no habría nuevas represalias contra países “hostiles” que no hubiesen acatado la orden de pagar en rublos el gas. Las exportaciones de carbón, gas y petróleo han reportado a Rusia ingresos de 93.000 millones de euros en los 100 primeros días transcurridos desde el comienzo de la invasión de Ucrania, según las estimaciones del Centro de Investigación de Energía y Aire Limpio, que atribuye un 61% de estas compras a los países de la Unión Europea, con una factura de alrededor de 57.000 millones.

Mientras tanto, la situación se complica en la ciudad de Severodonetsk, en el este de Ucrania, donde no quedan apenas vías de escape ni abastecimiento. Allí unos 500 civiles permanecen refugiados en la planta química de Azot, para los que Rusia abrirá hoy un corredor humanitario hacia el territorio bajo su control. Las autoridades ucranianas, por su lado, denunciaron que las fuerzas del Kremlin han destruido todos los puentes de la ciudad, situada en la provincia de Lugansk y uno de los principales epicentros de los combates durante los las últimas jornadas.

En este contexto, la Duma Estatal de Rusia aprobó la ampliación del delito de traición. El cambio más significativo es que tipifica expresamente como “traición” que un ciudadano ruso se pase al lado del enemigo durante un conflicto militar en el que Rusia esté involucrada. Hacerlo podrá ser castigado con hasta 20 años de cárcel.