POLÍTICA JUSTICIA
Òmnium pide a la ONU que se investigue el Catalangate
Acusa al Estado de usar Pegasus “para atacar el corazón de la democracia” || Urge a que se suspenda el uso de este software
El presidente de Òmnium Cultural, Xavier Antich, pidió ayer que la ONU intervenga para que se inicie una investigación “inmediata y eficaz” sobre el espionaje a dirigentes independentistas con el spyware Pegasus, que permita identificar y sancionar a los responsables del Catalangate. Lo dijo ante el relator especial sobre los derechos a la libertad de reunión pacífica y asociación, Clément Voule, en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Antich criticó la “complicidad del Estado español con el espionaje ilegal al independentismo”.
“El Catalangate es el caso más grande de espionaje en el mundo usando Pegasus, y hay pruebas convincentes que apuntan al Estado”, dijo, antes de remarcar que las víctimas son políticos, activistas y empresarios relacionados con el independentismo catalán.Acusó al Gobierno de utilizar esta herramienta “para atacar el corazón de la democracia: la sociedad civil y la oposición política”, y también de “incumplir su obligación de investigar sus hechos”. Por ello, pidió ante el Consejo un análisis imparcial, rápido, efectivo y público ante unos hechos que cree que vulneran el derecho a la libertad de reunión y asociación. “Es fundamental para garantizar que estos actos intolerables no se repitan nunca”, concluyóPor su parte, Voule admitió que el Catalangate es un caso “relevante” y consideró que se debe presionar a los estados para que se suspenda el uso de Pegasus.
“Nos pone en peligro a todos”, dijo, antes de apostar por una “moratoria a la venta de este tipo de programas espía”. Mientras, los guardias civiles que participaron en las pesquisas de la ‘Operación Judas’, que han situado a un paso del banquillo a trece miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR), declararon ayer ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que no les consta que en estas indagaciones se usaran sistemas de investigación como Pegasus, aunque sí se hicieron escuchas telefónicas autorizadas por un juez.