POLÍTICA POLÉMICA
Moncloa desoye el alud de críticas y avala a Rabat tras el asalto mortal
Las exigencias de explicaciones le llegan de Podemos al PP por la actuación de la policía marroquí || La Fiscalía alauí imputa tráfico de personas a 32 arrestados
El Gobierno mantiene su respaldo a la actuación de Marruecos en el asalto a la valla de Melilla el pasado viernes –que provocó la muerte de 23 migrantes, 37 según las ONG– ante el alud de críticas y reproches por lo sucedido, desde Unidas Podemos al PP. Si bien el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, volvió a culpabilizar a “las mafias internacionales que organizan” estos “ataques violentos”, la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, evitó valorar las palabras de agradecimiento a las autoridades marroquíes que Sánchez había pronunciado el viernes, y se limitó a lamentar las víctimas mortales que dejó el salto, donde se produjeron “imágenes que nos encojen el alma”. Rodríguez impidió a la ministra de Igualdad, Irene Montero, quien compareció junto a ella ante los medios, responder a las preguntas relacionadas con este asunto, previsiblemente por la disconformidad de Unidas Podemos ante las afirmaciones de Sánchez.
Si bien esto supone un nuevo episodio de tensiones en el seno del Gobierno de coalición, fuentes gubernamentales niegan que se trate de un acto de censura y dieron a entender que el silencio de Montero se había pactado previamente. No obstante, el portavoz de la formación morada, Pablo Echenique, reclamó al Gobierno la apertura “inmediata” de una investigación independiente para saber qué ha pasado, y anunció una proposición no de ley en la que se pedirá una condena de la actuación de las fuerzas de seguridad de Marruecos.Paralelamente, ERC, EH Bildu, Más País, Compromís y el PDeCAT, todos socios parlamentarios del Ejecutivo, registraron una petición en el Congreso para que Sánchez y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, den explicaciones por lo sucedido.La petición, que también lleva la firma de Junts, la CUP y el BNG, señala al Gobierno como “responsable” de lo ocurrido en Melilla porque consideran que es “consecuencia de las políticas migratorias de la Unión Euhropea y del nuevo acuerdo entre los Gobiernos de España y Marruecos”, el mismo que hizo variar la posición española sobre la autonomía del Sáhara Occidental. También el PP exigió la comparecencia urgente en el Congreso de Sánchez, al que instó a precisar el “estado de las políticas de cooperación con Marruecos en política de seguridad”.
Le pidió que se retracte de sus declaraciones sobre el asalto que “en ningún caso es un desenlace bien resuelto” porque “ninguna muerte en estas circunstancias puede resultar indiferente”. Además, pidió aclaraciones y la comparecencia en el Congreso tanto del presidente del Gobierno como del ministro del Interior. Por su parte, el PNV solicitó en el Senado que se investigue si ha habido devoluciones en caliente, si hay solicitantes de asilo y si hubo menores de edad entre las víctimas.
Mientras, la Fiscalía marroquí imputa delitos de tráfico de seres humanos, de secuestro de un agente marroquí para usarlo como rehén, violencia e injurias contra la policía a 32 migrantes detenidos el viernes en el marco del asalto a la valla.