TERRORISMO PAÍS VASCO
Homenaje a Miguel Ángel Blanco en el 25 aniversario de su asesinato
Ermua acoge un acto institucional en recuerdo al concejal del PP secuestrado por ETA en 1997 || El rey Felipe VI llama a la unidad con los partidos enfrentados
La localidad vizcaína de Ermua acogió ayer un acto institucional en el 25º aniversario del secuestro y asesinato del edil del PP Miguel Ángel Blanco, con una defensa de la memoria de las víctimas de ETA y apelaciones a la unidad. El homenaje fue presidido por el rey Felipe VI, que destacó la importancia del llamado ‘espíritu de Ermua’ que surgió como respuesta a esta acción terrorista de la banda armada. Al acto asistieron el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el lehendakari, Iñigo Urkullu, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, su homóloga en el Parlamento vasco, Bakartxo Tejería, el alcalde del municipio, Juan Carlos Abascal, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, la de Cs, Inés Arrimadas, el del PNV, Andoni Ortuzar, entre otros representantes políticos y sindicales.
La cita contó con representantes de Covite y familiares de Sotero Mazo, vecino de Ermua asesinado en 1980, al quien también se recordó. No asistieron otras asociaciones como AVT o Dignidad y Justicia ni representantes de Vox, Sortu ni EH Bildu. A lo largo de la jornada, se evidenció la tensión y las diferencias entre populares y socialistas por el acuerdo del Gobierno con EH Bildu en la Ley de Memoria (ver desglose).
Felipe VI destacó que las víctimas “dignifican nuestra democracia” y merecen “permanentemente respeto y máxima consideración” mientras que Pedro Sánchez aseguró que, si hoy Euskadi y España son “países libres y en paz” es gracias a todos “los que apostaron por la unidad”. Por su parte, el lehendakari exigió “una reflexión valiente y una autocrítica sincera a quienes ejercieron y ampararon el terrorismo”. Además, pidió “un futuro asentado en la verdad” que “deslegitime” la injusticia “ética y política” de la violencia de ETA.
Marimar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco, reclamó que la memoria democrática reconozca la historia del terrorismo “con buenos y malos, víctimas y verdugos”. “La justicia y la verdad debiera ser prioridad de cualquier gobierno. Lo contrario ni es justo ni decente”, insistió.