El condenado a 15 años de prisión por matar al joven italiano de una patada en la cabeza en una discoteca de Lloret huye de la justicia
No se ha presentado a una vista y las acusaciones solicitan en la Audiencia que dicte una orden internacional de detención
El condenado a 15 años de prisión por matar de una patada en la cabeza a un turista italiano a la discoteca S. Trop de Lloret de Mar la madrugada del 12 de agosto del 2017 ha huido de la justicia. Este miércoles estaba fijada en la Audiencia de Girona una vista por resolver si Rassoul Bissoultanov, que hasta ahora estaba en libertad porque había cumplido el tiempo máximo en preventiva, ingresaba de nuevo en la prisión hasta que la sentencia sea firme. El procesado, sin embargo, no ha comparecido. Por eso, el fiscal y las acusaciones han solicitado al tribunal que dicte una orden internacional de detención e ingreso en la prisión. La Audiencia, siguiendo el veredicto del jurado popular, lo condenó como autor de un delito de asesinato.
La semana pasada, la sección cuarta de la Audiencia de Girona condenó a Rassoul Bissoultanov, a 15 años de prisión. El acusado, a quien el jurado popular declaró culpable de un delito de asesinato, se enfrentaba a una pena de hasta 25 años. La sentencia, sin embargo, le impuso la pena mínima por este delito porque entendía que la alevosía con la que actuó cuando propinó la patada de pie a la cabeza de la víctima fue "repentina": "No hubo una repetición de golpes, sino una sola patada, y que la traición se da durante el transcurso de una pelea entre varias personas".
Al juicio, Bissoultanov llegó en libertad. El motivo es que había superado los cuatro años máximo en prisión preventiva que prevé la ley. Ahora, sin embargo, la Audiencia de Girona había señalado una vista este miércoles para resolver si tenía que volver a entrar en la prisión porque ya hay una sentencia y la ley fija un tope de hasta la mitad de la condena mientras no sea firme.
El condenado no se ha presentado a la vista. El abogado de la acusación popular en nombre de la Fecasarm y de Spain Nightlife, Joaquim Boadas, ha señalado que eso confirmaría que el procesado, de origen checheno, ha huido de la justicia: "Lo vivimos con indignación. El hecho de huir es una falta de respeto hacia la víctima y su familia y no es la mejor manera de compadecerse del infortunio del joven italiano".
El fiscal Víctor Pillado y las acusaciones han solicitado en la Audiencia de Girona que dicte una orden internacional de detención e ingreso en la prisión contra Rassoul Bissoultanov. Según fuentes judiciales, hasta la semana pasada el condenado se siguió presentando semanalmente en la Audiencia para firmar cumpliendo las comparecencias ordenadas para reducir el riesgo de huida.
La defensa de Bissoultanov, encabezada por el letrado Carles Monguilod, observa que hace una semana que no había podido comunicarse con él. Monguilod entiende que el condenado "se ha asustado porque tiene miedo de volver a entrar en la prisión" y que no confía en la justicia porque está convencido de que el veredicto declarándolo culpable de asesinato era "injusto": "Nadie más que él sabía si tenía intención de matar a la víctima, y siempre ha dicho que no".
La incomparecencia del condenado a la vista de este miércoles no para el procedimiento judicial y las partes están ultimando los recursos contra la sentencia de la Audiencia de Girona. Monguilod ha remarcado que seguirá preservando el derecho de defensa de Bissoultanov porque entiende que, a pesar de que haberse evadido de la acción de la justicia, la condena por asesinato es excesiva y no se basó en las pruebas desplegadas al juicio.
Aparte de la causa judicial en los tribunales gerundenses, la justicia italiana también abrió juicio contra el procesado. Allí, se puede enfrentar a una condena de cadena perpetua.