Junts sella su rechazo a la mesa de diálogo y Borràs se reafirma al frente del Parlament

Junts descartó ayer de forma definitiva su participación en la mesa de diálogo entre el Gobierno central y la Generalitat y cerró filas con su líder, Laura Borràs, para quien la Fiscalía ha pedido esta semana seis años de cárcel y 21 de inhabilitación por presunto fraude cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC). En el congreso que la formación celebra este fin de semana en l’Hospitalet de Llobregat, el secretario general de Junts, Jordi Turull, criticó la mesa de diálogo, después de que el viernes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Pere Aragonès, acordaran que se volverá a reunir a finales de mes. “Más que una mesa iría bien que crearan un grupo de Whatsapp”, ironizó.

En este sentido, aseguró que no se dejarán “arrastrar por cantos de sirena interesados y envenenados” del PSOE, y sentenció que “para hacer de socorristas de un naufragio electoral y político, que se busquen otros socorristas”. No obstante, subrayó que su partido defiende una mesa “de negociación, con garantías y en la que se hable de amnistía y autodeterminación”.Por su parte, la presidenta del partido, Laura Borràs, denunció que la “represión” que sufre el independentismo catalán es “una estructura del Estado”, y llamó a “prestigiar” el Parlament tras la petición de la Fiscalía. De hecho, dijo que la mejor forma para dignificar la Cámara es que ella siga adelante, a pesar de las críticas y los reproches.Paralelamente, el partido aprobó no suspender de militancia a quien se le abra juicio oral ni expulsar a los condenados con sentencia firme por casos que estimen de lawfare –persecución judicial por motivos políticos–, blindando así a Borràs.La ponencia política del partido también abrió la puerta a que la formación plantee a las bases la posibilidad de continuar –o no– en el Govern o, en su defecto, tomar las medidas que se consideren oportunas.

Aunque esta opción se baraja como potencial y aún sin definir, la dirección prepara un balance del cumplimiento del acuerdo que Junts cerró con ERC en el pacto de investidura.Además, el coordinador de la ponencia, Aleix Sarri, explicó que evaluarán antes de las municipales de 2023 si deben romper el pacto con el PSC en la Diputación de Barcelona. “Cualquier decisión se tomará caso por caso, habiendo escuchado a los representantes de Junts de cada territorio y teniendo en cuenta el balance de las acciones del Govern”, sentenció.

Vilagrà dice que si no hay acuerdos con el Estado “no se entenderá”La consellera de la Presidència, Laura Vilagrà, afirmó ayer que de la reunión de la mesa de diálogo prevista para finales de este mes deben salir acuerdos “tangibles” sobre la judicialización y la represión.

“Si no no se entendería lo que estamos haciendo”, dijo en una entrevista a RAC1. Por otra parte, admitió que el Govern no ha recuperado aún la confianza plena en el Estado, que “dependerá de los resultados” de esta reunión. Sobre los participantes en la mesa de diálogo, dijo que es una cita “de Gobierno a Gobierno”.

Por su parte, el líder de ERC, Oriol Junqueras, insistió en la defensa de la mesa diálogo y remarcó que no se dejarán “intimidar por nadie” en este camino. “No nos hemos dejado intimidar por quien nos ha encerrado en la prisión ni tampoco nos dejaremos intimidar por aquellos a quienes les da pereza defender los derechos de este país en todas partes”, sentenció.