INFRAESTRUCTURAS ENERGÍA
Ribera dice que el gasoducto MidCat podría estar “operativo en ocho o nueve meses”
Respalda aumentar la interconexión energética como pide Alemania, pero advierte que el visto bueno de Francia es “clave” || El Govern celebra esta iniciativa “estratégica”, pero pide financiación a Europa
Un día después de que el canciller alemán, Olaf Scholz, pidiera construir un gasoducto que abastezca a Europa desde la península ibérica, la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, afirmó ayer que el catalán MidCat “podría estar operativo en unos ocho o nueve meses”. Este gasoducto, diseñado para conectar España y Francia, lleva años paralizado por sus elevados costes y el bajo precio del suministro. Quedan por construir 226 kilómetros de tuberías desde la localidad catalana de Hostalric hasta la francesa Barbaira.
“Estamos trabajando con Enagás y Teréga –empresas promotoras de este gasoducto–para ver cómo acelerar una primera interconexión con menor complejidad”, apostilló.Sin embargo, la ministra advirtió que el visto bueno de Francia es “clave” si se quieren construir nuevas infraestructuras de este tipo. “Tiene poco sentido que nosotros corramos mucho si del lado francés se convierte en un callejón sin salida”, remarcó. También consideró que, al tratarse de un proyecto que servirá para mejorar la seguridad de suministro de toda Europa, debería financiarse como un proyecto europeo.Defendió que el gasoducto debería tener una vida útil de unos 30 o 50 años y poder transportar hidrogeno, teniendo en cuenta que el gas se tendría que dejar de utilizar para cumplir con el objetivo de neutralidad climática de la UE, marcado para el 2050.Paralelamente, Ribera dijo que la instalación de un compresor adicional en las interconexiones actuales con Francia por el País Vasco podría elevar entre hasta un 30% la capacidad de exportar gas desde España.
El president de la Generalitat, Pere Aragonès, celebró la iniciativa de Scholz, y recordó que el Govern lleva “meses”reivindicando el diseño del MidCat. Aseguró que es un “proyecto estratégico para Europa y para Catalunya” y que “es imprescindible que la Comisión Europea dé apoyo y financiación”. En la misma línea, la consellera de Acción Exterior, apostó por impulsar esta infraestructura y aprovechó para exigir a la UE que presione al Estado para “hacer realidad el corredor mediterráneo”.También desde Foment del Treball instaron al Gobierno central a liderar la construcción del MidCat, mientras que el PP criticó que el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, haya dejado el proyecto “en segundo plano”.
Por su parte, Ecologistes en Acció y el partido político Alianza Verde rechazaron la construcción del MidCat. Lo consideraron un “paso atrás” en la transición ecológica y pidieron avanzar en un modelo basado “cien por cien” en las energías renovables que apueste “hacia la soberanía energética”
España puede elevar en hasta un 30% el gas enviado a Francia si instala un compresor adicional
Los promotores del MidCat recibieron más de 7,3 millones de euros para estudios preliminares
El Midi-Catalunya, más conocido como MidCat, es un megaproyecto de interconexión gasística entre España y Francia impulsado por la empresa española Enagás y la francesa Teréga, que está valorado en más de 3.000 millones de euros. El plan inicial contemplaba la construcción de un gasoducto de 227 kilómetros que conecte ambos territorios a través de Catalunya.
Con el apoyo del Gobierno de Mariano Rajoy y de la Comisión Europea, que entonces ya buscaba vías alternativas al gas ruso a raíz de la anexión de Crimea, los promotores del MidCat recibieron entre 2013 y 2019 más de 7,3 millones de euros de fondos públicos europeos que únicamente se destinaron a estudios preliminares. Mientras, el proyecto provocó el rechazo de una parte del territorio catalán, principalmente grupos ecologistas. Finalmente, el MidCat quedó paralizado en 2019, y Bruselas dejó de financiar los planes de Enagás.
Los reguladores consideraron entonces que el mercado no había mostrado “interés comercial” por esta propuesta de interconexión y que los costes previstos eran “altos en comparación con los estándares europeos”.Actualmente, dos gasoductos pasan desde el País Vasco y Navarra al otro lado de los Pirineos y suman una capacidad de apenas 8.000 millones de metros cúbicos anuales, cuando el ‘Nord Stream 2’, el fallido proyecto planteado para exportar gas de Rusia a Alemania, puede llevar unos 55.000 millones.