La militancia fuerza a Junts a pasar a la oposición y deja sola a ERC en el Govern

La militancia de Junts decidió ayer por más de un 55% de los votos romper el gobierno de coalición con ERC y pasar a la oposición. La presidenta, Laura Borràs, dijo que “Junts gana, Pere Aragonès pierde” y anunció una oposición “responsable y firme”. Unos 250 cargos de la formación dejan la Generalitat, entre ellos, una veintena de leridanos.

La militancia de Junts decidió ayer por un 55,73% de los votos salir del Govern de coalición con ERC y pasar a la oposición. Un 42,39% de los votos fueron a favor de la permanencia en el Executiu y hubo un 1,88% de votos en blanco en una consulta en la que participaron el 79,18% de los 6.465 militantes con derecho a voto. En Lleida Junts tiene unos 500 militantes.

La consulta fue telemática y tuvo lugar durante todo el jueves y hasta ayer a las 17.00 horas. El resultado de la votación deja en una situación incierta tanto a Junts, por las posibles divisiones internas, como a la propia Esquerra, abocada a gobernar en solitario y a cubrir todas las vacantes políticas y de cargos de confianza que deja la formación de Puigdemont. La consulta a la militancia de Junts, celebrada en plena negociación de los presupuestos de la Generalitat y a 8 meses de las elecciones municipales, acabó con un gobierno bipartito independentista que se formó tras las elecciones del 14 de febrero de 2021 en las que ERC obtuvo 33 escaños (igual que el PSC) y Junts, 32.

Pero la coalición ya había comenzado en 2015 entre ERC y Junts pel Sí. En su comparecencia tras anunciar el resultado de la consulta, la presidenta del partido y el secretario general, Laura Borràs y Jordi Turull, avanzaron que los consellers de Junts ya comenzaron ayer a presentar la renuncia a sus cargos. Hablaron del acto de ayer como un ejercicio de “radicalidad democrática” y aseguraron que “hemos salido reforzados”, con lo que rechazaron que se hayan ahondado divisiones internas.

Borràs aseguró que la legitimidad de Pere Aragonès como President “ha quedado en entredicho” y le señaló como el “perdedor” de la consulta. Le invitó a someterse también a una consulta ante el Parlament. Turull dijo que “quizás sería bueno” saber qué mayorías han quedado en el Parlament a través de una cuestión de confianza como la planteada por Albert Batet el pasado día 27, que ha desencadenado la crisis de Govern.

Borràs ya había anunciado su voto partidario a la salida del Executiu y Turull no desveló el suyo, aunque señaló que “ahora sería muy fácil” decirlo.

Una veintena de cargos leridanos salen del Executiu

Una de las consecuencias de la salida del Govern es la pérdida no solo de las siete consellerias de Junts (además de Jordi Puigneró, cesado el día 28; Violant Cervera; Jaume Giró; Victòria Alsina; Gemma Geis; Josep Maria Argimon y Lourdes Ciuró) sino de unos 250 cargos entre los departamentos y las empresas públicas de la Generalitat. En Lleida, una veintena de miembros de Junts que ocupan cargos del Govern dejarán sus puestos.

Entre ellos, la consellera Cervera; el director general de Servicios Sociales, Josep Maria Forné; el secretario de Infraestructuras y Movilidad, Isidre Gavín; el director general de Impacto Territorial y Social del Conocimiento, Xavier Quinquillà; el delegado de la Generalitat en el Pirineo, Ricard Pérez, y los directores de Servicios Territoriales en el llano Montse Mesegué; Ramon Alturo; Josep Pifarré; Joan Segura; Dolors Tella, y del Pirineo, Felip Benavent (Salud). El despliegue de delegaciones en el Pirineo debía seguir en los próximos meses con las de Economía (Junts), Cultura y Empresa (ERC). Otros leridanos de Junts que deberán dejar el Govern son Joan Maria Piqué (director de Prospectiva en Acción Exterior); Jesús Fierro (Políticas de Montaña) o bien Miquel Àngel Cullerés (subdirector general de Justicia Juvenil), entre otros.La renuncia de todos estos cargos implica unos sueldos anuales de unos 22 millones de euros, según un recuento publicado ayer en el diario Ara.

También afecta a las arcas del propio partido, ya que los cargos electos aportan una parte de sus nóminas a la financiación de la formación que les ha designado. En este caso, se trataría de medio millón de euros cada año.

Una ruptura sin consecuencias en el gobierno de la Paeria

La ruptura del Govern no afectará en ningún caso al gobierno de la Paeria, según confirmaron tanto ERC como el primer teniente de alcalde, Toni Postius, de Junts, que reiteró que ambos partidos están comprometidos a sacar adelante los proyectos en marcha.

Mientras Borràs y Turull anunciaron una oposición en el Parlament “firme y responsable” y defendieron la salida del Govern como apuesta por el “eje nacional”, en Lleida, la alcaldesa de Les Borges Blanques, Núria Palau, dijo que “ahora hay que trabajar para que el partido sea fuerte y cohesionado”. Eloi Bergós, coordinador de Junts en Lleida, valoró “muy positivamente la altísima participación” en la consulta.