La Unión Europea no previó la amenaza nuclear de Putin
Borrell admite que desde Bruselas tampoco creyeron que Rusia fuera a atacar a Ucrania
El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, reconoció este lunes que Europa no fue capaz de prever la "amenaza nuclear" del presidente ruso, Vladímir Putin, en el marco de la guerra contra Ucrania. "No hemos sido capaces de prever ni la capacidad de Putin de escalar el nivel de movilización masiva ni la amenaza nuclear abierta", aseguró Borrell en su discurso de inauguración de la conferencia que cada año celebran los embajadores de la UE.
El jefe de la diplomacia europea admitió también que la UE tampoco creyó que Rusia fuera a atacar a Ucrania. "No creímos que la guerra fuera a llegar. Tengo que reconocer que aquí en Bruselas, los americanos nos decían que (los rusos) atacarían y fuimos reacios a creerlo", afirmó el exministro español, que recordó cómo el secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, le informó pocos días antes del inicio de la invasión, el 24 de febrero, de que iba a ocurrir.
Borrell pronunció un discurso con un tono autocrítico, en el que trasladó a los embajadores que "no siempre está contento en cómo trabajan" las delegaciones que la UE tiene desplegadas en distintos países y se quejó de que no recibe información actualizada de lo que está ocurriendo. "Debería ser la persona mejor informada del mundo, al menos tanto como cualquier otro ministro de Exteriores", señaló el alto representante, que pidió a los embajadores que vivan "en modo de crisis" y le informen "en tiempo real" de cada situación. "Quiero ser informado por vosotros, no la prensa. Algunas veces sé más lo que ocurre en algunos sitios leyendo la prensa que por vuestros informes, que llegan algunas veces demasiado tarde", afirmó el jefe de la diplomacia europea.
Borrell dijo que la UE "todavía tiene mucho que hacer para ser un poder" y, en este sentido, apuntó que "debe escuchar más al resto del mundo" y "tener más empatía", dado que muchos países "no están listos para seguir la exportación" del modelo europeo, "por razones culturales, económicas e históricas".