SUCESOS INFRAESTRUCTURAS
Los restos de un cohete chino obligan a cerrar el espacio aéreo de Catalunya casi una hora
Provocaron retrasos en 300 vuelos en toda España, la mitad en El Prat, y acabó impactando en el Pacífico
La entrada en la atmósfera de los restos de un cohete chino fuera de control, provocó ayer que los aeropuertos de Barcelona y Girona, así como los de Baleares, Aragón y Navarra tuvieran que suspender toda su actividad durante cerca de una hora. El cierre del espacio aéreo a primera hora de la mañana, entre las nueve y las diez, provocó retrasos en unos 300 vuelos, más de la mitad en el aeropuerto de El Prat. En concreto, en Barcelona se vieron afectados 157 vuelos de pasajeros y de carga, de los que 66 sufrieron una demora superior a los 15 minutos.
En Girona, el cierre afectó a dos vuelos con salida y destino Londres-Stadsted con un retraso de una hora y media. En Reus la operativa no coincidió con la franja horaria de afectación. Tampoco hubo retrasos en los aeropuertos de la provincia de Lleida (ver desglose).
Otros países cono Francia, Portugal o Chipre también cerraron su espacio aéreo debido a la llegada del artefacto. El cohete, de gran tamaño, atravesó el cielo por encima de Catalunya y el norte de Baleares, pero al ser algo que estaba previsto, su entrada en la atmósfera estuvo monitorizada en todo momento por los gestores de navegación aérea, en este caso Enaire, que, con el objetivo de evitar que algún fragmento pudiera colisionar con un avión, procedió al cierre del espacio aéreo a 100 kilómetros a la rotonda. En total, el espacio aéreo cerrado abarcó una superficie de 1.200 kilómetros de ancho y 200 kilómetros de alto.Los restos del cohete que transportaba el laboratorio Mengtian de la estación espacial china impactaron finalmente en el océano Pacífico a las once de la mañana, según el departamento de defensa de EEUU.Entre los ciudadanos que tenían programados vuelos que se vieron afectados por la paralización de los aeropuertos reinó la sorpresa y el humor por la insólita situación.
“Los tripulantes nos han dicho cuando ya estábamos montados en el avión que había un cohete chino sobrevolando el espacio aéreo y que no podíamos despegar” explicaba una de las afectadas en El Prat, que afirmó que las excusa le pareció en un principio “de película”.Desde que China lanzó el cohete, el pasado 31 de octubre, los sistemas de vigilancia estadounidense y europeo estuvieron observando con radares y sensores la reentrada en la atmósfera de CZ-5B, la parte central del cohete, una pieza de basura espacial de 23 toneladas y 30 metros de largo. Es normal que tras los lanzamientos de las misiones espaciales caigan restos a la Tierra, pero no tan grandes. Además, aunque normalmente los cohetes tienen un radar para controlar dónde caerán los restos, China no los instala para ahorrar costes, lo que provoca que su basura estelar siempre caiga a la Tierra de manera descontrolada.
Sin afectación en los aeropuertos de Alguaire y La Seu d’Urgell
El cierre del espacio aéreo que se produjo ayer a primera hora de la mañana, entra las nueve y las diez, como consecuencia de la entrada en la atmósfera de los restos de un cohete chino de grandes dimensiones no tuvo afectación alguna en los vuelos que llegaron o salieron de los aeropuertos leridanos ubicados en Alguaire y La Seu d’Urgell, ya que la operativa de los mismos no coincidió con la franja horaria de afectación. Casualmente, los viernes son uno de los dos días a la semana, junto al domingo, en que ambas infraestructuras aeropuertuarias reciben vuelos comerciales, que llegan procedentes de Palma de Mallorca y de Madrid. La caída de restos de este cohete, que llevaba un laboratorio de la estación espacial china, son el ejemplo de una práctica que para nada es minoritaria: entre el 60 y el 70% de los lanzamientos de cohetes y satélites de los últimos veinte años se han saldado con la caída sin control de piezas a la superficie terrestre.