La Generalitat gestionará el Eje Transversal a partir del 1 de enero del 2023

La Generalitat ha pagado este miércoles 479 millones de euros a Cedinsa y ha puesto así punto final a la concesión del Eix Transversal. La operación se ha financiado con remanentes de tesorería, correspondientes al año 2021, y se ha descartado recurrir a un crédito bancario o al FLA, según el Departamento de Economía. Tal como ya anunció la conselleria el pasado mes de mayo, el Ejecutivo ha activado la operación aprovechando la "ventana de oportunidad" que prevé el contrato con Cedinsa para este 2022. La consellera de Economía, Natàlia Mas, ha destacado que se trata de la operación de ahorro "con más impacto" de la última década. El ejecutivo calcula que el final de la concesión supondrá un ahorro de hasta 781 millones de euros hasta el 2040, unos 46 millones anuales.

De esta forma, a partir del 1 de enero de 2023 la Generalitat pasará a ser la encargada de la gestión de la C-25, que une Cervera con Caldes de Malavella. Según detalló el conseller de Territorio, Juli Fernández, el mantenimiento de la infraestructura tendrá un coste para el Govern de entorno los 15,5 millones anuales.

Tal y como ha concretado el Departamento de Economía, la posibilidad de recuperar la gestión de la autovía y el precio de reversión a pagar por ejercer esta opción eran dos aspectos que se recogían en el contrato firmado entre ambas partes. Este contrato preveía el derecho de la Generalitat a recuperar la gestión de la autovía en tres momentos concretos: en 2017, 2022 y 2027. Precisamente, la titular de Economía, Natàlia Mas, ha recordado que en 2017, con Pere Aragonès como secretario general del departamento, se exploró la opción de llevar adelante la operación, pero quedó detenida por la aplicación del 155.

Asimismo, fuentes de Economia han explicado que de los 479 millones pagados a Cedinsa, una parte será considerada como inversión de la Generalitat (120 millones aproximadamente), mientras que el resto computará como reducción de la deuda de la administración.

Por otro lado, el Govern ha informado de que para calcular el ahorro de 781 millones de euros se han comparado, por un lado, los pagos estimados por peaje a la sombra que la Generalitat debería haber hecho en la concesionaria entre 2023 y 2040 según las previsiones de tráfico y los términos del contrato y, por otro, el pago de los 479 millones de euros y los costes que deberá asumir la Generalitat por la conservación de la autovía y las reinversiones necesarias para mantenerla en el mismo período.

La consellera de Economía, Natàlia Mas, ha asegurado en una atención a los medios que el incremento de la recaudación que el Govern está consiguiendo en los últimos meses ha permitido, hasta ahora, aumentar el presupuesto destinado a la sanidad, así como ha permitido el pago a Cedinsa. Mas ha defendido el fin de la concesión por el propósito de ahorro con el que se ha puesto en marcha, y ha insistido en que se trata de una operación "con todo el sentido". "Debemos revisar los presupuestos que tenemos y las opciones que tenemos y, si hay posibilidad de ejercer cláusulas de salida para optimizar los recursos públicos, es nuestra responsabilidad hacerlo", sostuvo.