PANORAMA
Aragonès celebra que se elimine la sedición, pero buscará la amnistía
Niega que el “acuerdo” para derogar el delito sea una contrapartida para apoyar las cuentas de Sánchez || El PSOE asume que su decisión tendrá “un coste electoral”
El president de la Generalitat, Pere Aragonès, se congratuló ayer del “acuerdo” alcanzado con el Gobierno central para la derogación del delito de sedición, lo cual, aseguró, permite avanzar hacia el “fin de la represión” y supone un paso adelante en el camino de la resolución del conflicto político entre Catalunya y el Estado. En una comparecencia desde la Galería Gótica del Palau de la Generalitat, el jefe del Executiu destacó que la proposición de ley para reemplazar el delito de sedición por otro de “desórdenes públicos agravados” y con penas más bajas permite “profundizar en el proceso de desjudicialización”, ya que supone una “mejora para el conjunto de las personas represaliadas”, si bien ha reconocido que aún “queda camino por recorrer” hasta la “completa desjudicialización del conflicto”, sin renunciar a la amnistía. Aragonès explicó que sigue habiendo “cuestiones abiertas que se podrán plantear en el trámite parlamentario” de la reforma del Código Penal, en alusión, por ejemplo, a la malversación.
El president, además, insistió el desligar este tema de acuerdos que pueda haber en otros ámbitos, como por ejemplo los pactos presupuestarios. “La resolución del conflicto no va de un acuerdo de partidos ni de siglas, sino que va de derechos y libertades”, aseveró.También de un eventual acuerdo en materia presupuestaria quiso desvincular la propuesta de ley el portavoz del PSOE, Patxi López, que defendió que pese a ser consciente de que la derogación del delito de sedición tendrá un coste electoral, se mostró convencido de que sus votantes lo entenderán si son capaces de trasladar los resultados que está teniendo en Catalunya. Por su parte, el líder de los socialistas en Catalunya, Salvador Illa, mostró un tono duro y sostuvo que la reforma de la sedición no supone despenalizar los hechos de 2017 que condujeron al 1-O: “Nada de amnistía, solo se hace una actualización del Código Penal.
No se despenalizan las conductas típicas de 2017”, afirmó antes de recordar que el delito de rebelión y la ley del artículo 155 de la Constitución sobre la suspensión de la autonomía siguen vigentes.Mientras, desde Unidas Podemos aseguraron que la reforma será buena para volver a encaminar las relaciones entre Catalunya y el Estado.