JUSTICIA ?PROCÉS?
El Supremo ordena repetir el juicio a la Mesa del 1-O por parcialidad de dos magistrados
El Superior de Justicia condenó a las leridanas Simó y Barrufet junto a Corominas y Guinó por desobediencia, y absolvió a Boya || Su recurso reclamaba el derecho a un tribunal imparcial
El Tribunal Supremo ha ordenado repetir el juicio contra los cuatro miembros de la Mesa del Parlament de 2017 condenados por un delito de desobediencia por permitir la tramitación de las leyes relacionadas con el procés que posibilitaron la celebración del referéndum del 1-O, ante la falta de imparcialidad de dos de los magistrados que les condenaron. La Sala de lo Penal ha dictado una sentencia que anula la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya que condenó a los miembros de Junts pel Sí en la Mesa Lluís Corominas, Lluís Guinó y las leridanas Ramona Barrufet y Anna Simó a 20 meses de inhabilitación y a pagar una multa de 30.000 euros, y absolvió a la exdiputada de la CUP y también leridana Mireia Boya. Asimismo, declara la nulidad del juicio, que deberá ser celebrado con una composición distinta del tribunal.La Sala estima así el recurso de Anna Simó, al que se adhirieron el resto de los condenados, al considerar que se les vulneró el derecho a un tribunal imparcial debido a que dos de los magistrados que integraron el tribunal, el presidente del TSJC José Luis Barrientos y el magistrado Ramos Rubio, ponente de la sentencia, habían exteriorizado ya en autos previos una toma de postura explícita acerca de cuestiones que constituyeron después objeto esencial del juicio.
El Alto Tribunal subraya que el derecho a ser juzgado por un tribunal imparcial exige que sus integrantes comparezcan al acto del plenario ajenos a cualquier toma previa de posición sobre las cuestiones esenciales que allí han de tratarse, desprovistos de cualquier clase de prejuicio valorativo. “Si fuera procedente la metáfora: la partida debe comenzar con el marcador a cero”, señalan los jueces.En su recurso, Simó remarcaba que Barrientos y Ramos formaron parte de la sala que admitió a trámite las tres querellas que dieron lugar a la causa, así como de la que desestimó los recursos de súplica interpuestos contra esas decisiones. Finalmente, el Tribunal Superior de Justicia catalán condenó a los miembros de JxSí en la Mesa en la etapa de Carme Forcadell por su “contumaz” desobediencia al Constitucional para permitir la tramitación de las leyes del procés que hicieron efectivo el 1-O.Barrientos y Ramos, de forma excepcional, ya fueron apartados del juicio a la Mesa de Roger Torrent, actual conseller de Empresa, a instancia de Josep Costa?, por su posicionamiento no suficiente objetivo con la causa independentista.
Los cuatro encausados esperan tener “más garantías”
La celebración de un nuevo juicio podría perjudicar a los exmiembros de la Mesa del Parlament que presidió en 2017 Carme Forcadell. Y es que corren el riesgo de que el nuevo tribunal que les juzgue haga una nueva valoración de los hechos por los que están acusados y de su castigo, lo que les podría comportar ser condenados a penas mayores. Aunque también podría pasar todo lo contrario, que los magistrados hicieran una interpretación más beneficiosa para ellos y las penas se les rebajaran.
En todo caso, todavía no se había comenzado a ejecutar la pena dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya, que les condenó a 20 meses de inhabilitación por desobediencia, ni se les había reclamado las multas económicas. Por ahora, los cuatro encausados confían en que el nuevo juicio que haga el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya les ofrezca “más garantías” que el anulado por el Tribunal Supremo.