Los vídeos de Melilla ponen en entredicho la versión de Marlaska

Las imágenes de la tragedia del salto masivo en Melilla del 24 de junio, en el que murieron al menos 23 migrantes, contradicen la versión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que había afirmado que no hubo “hechos trágicos” en suelo español. Así lo han afirmado los portavoces de la comisión de Interior en el Congreso, que ayer visualizaron los vídeos de los hechos. Todos ellos, a excepción del PSOE, mantuvieron que el titular de Interior tiene que dar más explicaciones sobre lo sucedido.

“No puedo decir que haya habido muertos en suelo español, pero tampoco puedo decir que no haya habido”, dijo la republicana Maria Dantas. Más tajante se mostró el portavoz de Bildu, Jon Iñarritu, que dijo que “no se puede negar que los hechos principales ocurrieron en territorio español”. Además, acusó al ministerio del Interior de “poco transparente” y “esconderse en generalidades”.

Desde Podemos rechazaron que los migrantes actuaran con una fuerza desproporcionada. Los diputados constataron que se practicaron 470 devoluciones en caliente, previo acceso de gendarmes marroquíes a suelo español, y que los agentes españoles golpearon a los migrantes, tal y como había denunciado el Defensor del Pueblo. También señalaron que la ambulancia no intervino para asistir a los heridos.

Pero los dos partidos del Gobierno discreparon respecto a la actuación de los policías, ya que el socialista David Serrada sostuvo que las devoluciones se hicieron “de manera individual” y en condiciones que “se ajustan a la legalidad”. Por su parte, PP, Vox y Cs coincidieron en defender la “profesionalidad” de la Guardia Civil y eximieron de responsabilidad a sus agentes. Criticaron la opacidad de Marlaska pero se remitieron a la comparecencia que este hará el próximo miércoles antes de decidir si apoyan una comisión de investigación.En cambio, el ministro del Interior defendió que las grabaciones demuestran que no hubo fallecidos en territorio español y que la Guardia Civil actuó con “proporción” para hacer frente al “ataque violento” contra la frontera.

Además, tildó de “sesgadas” las críticas de los diputados y les acusó de “reducir a un tercio” el visionado de las grabaciones.

Ocho horas de grabación a puerta cerradaLos portavoces de la comisión de Interior accedieron ayer a ocho horas de grabaciones del salto a la valla. Lo hicieron a puerta cerrada, lo que provocó las críticas de los diputados, que consideraron que el visionado debería haber sido público.

También denunciaron que Interior había “tenido la posibilidad de girar las cámaras y ver qué pasaba”, pero no lo hizo. A las cinco horas los presentes consideraron que ya habían visto suficiente.