PODER JUDICIAL
El expresidente del Constitucional se despide con críticas al poder político
Advierte que las “soberanías populares” no están por encima de la Constitución || El nuevo TC tiene ahora mayoría progresista y debe elegir al sucesor de Trevijano
El presidente saliente del Tribunal Constitucional (TC), Pedro González-Trevijano, se despidió ayer de su cargo con un discurso en el que reivindicó que “en España solo hay una soberanía”, “la del pueblo español”, asegurando que “ante la Carta Magna no son oponibles soberanías populares que dicen emanar, sin intermediación alguna, del supuesto mandato directo de un colectivo o de una colectividad”. Dicho de otra manera, pidió poner límites al poder político. Durante la toma de posesión de los cuatro nuevos magistrados del alto tribunal, González-Trevijano criticó también que se use la corte de garantías como “instrumento de refriega política”, que “en ocasiones se producen injustificadas recusaciones en cascada carentes de toda sustantividad con el burdo fin de obstaculizar su funcionamiento y atentar a su credibilidad, cuando no alterar fraudulentamente su composición”.
Los cuatro nuevos magistrados del TC, César Toulouse y María Luisa Segoviano, designados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), y Juan Carlos Campo y Laura Díez, propuestos por el Ejecutivo central, tomaron posesión en un acto solemne en la sede del órgano en Madrid. La toma de posesión implica la salida de los cuatro magistrados que tenían el mandato caducado desde junio. Ahora, el nuevo pleno, formado por siete magistrados considerados progresistas y cuatro conservadores, deberá elegir mañana presidente y vicepresidente del TC.
Los magistrados que se postulan como sucesores de González-Trevijano son Cándido Conde-Pumpido y María Luisa Balaguer, ambos del sector progresista. Al hilo, González-Trevijano cargó contra “la falsaria dicotomía entre jueces ‘conservadores’ y ‘progresistas’, aseverando que. “el magistrado no representa a nadie”.Por su parte, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, manifestó que el TC tiene por delante la tarea de recuperar el prestigio y la credibilidad “dañada” en las últimas fechas.
Mientras, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, aseguró que Pedro Sánchez no quiere renovar el CGPJ porque “no le interesa” su “independencia” sino que tengan “cierta obediencia” al Gobierno.