Govern y PSC, cerca del pacto presupuestario y hoy intentarán cerrar “los últimos flecos”

Superado el escollo que suponía la construcción de la carretera B-40, exigida por el PSC y asumida finalmente por ERC para tratar de “desencallar” los presupuestos catalanes de 2023, parece ser que las negociaciones empiezan a ver la luz al final del túnel. El Govern de Pere Aragonès y los socialistas retomaron ayer las reuniones y, aunque no llegaron a ningún pacto definitivo, ambos admitieron avances en las conversaciones y hoy se volverán a reunir para tratar de cerrar “los últimos flecos”. El equipo negociador del Executiu –liderado por las conselleras Laura Vilagrà y Natàlia Mas– y del PSC celebraron ayer una reunión en el Palau de la Generalitat, que comenzó a las cuatro de la tarde y se alargó durante dos horas.

Este encuentro se suma al que mantuvieron a lo largo de la mañana, que duró casi cuatro horas. Fuentes del Govern destacaron el “cambio de actitud” del PSC, que igualmente aplaudió el “paso importante” que supone la aceptación por parte de ERC de la B-40, si bien insistió en que todavía quedan “flecos” que, subrayan, “no son menores”. Concretamente, desde el PSC reconocen que quieren frenar la apertura de delegaciones de la Generalitat en el exterior, que el Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) pase a depender del Parlament o negociar la ampliación del aeropuerto de El Prat.

No obstante, el Govern ha rechazado incluir este último punto –junto al complejo Hard Rock o hasta hace una semana la B-40– en la negociación de los presupuestos. “Quedan cosas por resolver y esperemos ser capaces de hacerlo”, dijo la portavoz del PSC Èlia Tortolero, al término de la reunión matutina entre el Govern y la formación que lidera Salvador Illa. También la portavoz de Esquerra, la leridana Marta Vilalta, se mostró “convencida” de que las conversaciones con los socialistas están bien encaminadas.

“Estamos muy cerca”, aseguró. En caso de llegar finalmente a un acuerdo con los socialistas, el Govern podría convocar una reunión extraordinaria para aprobar el proyecto y no demorar así su tramitación parlamentaria, puesto que desde entonces se abriría un periodo aproximado de un mes hasta su aprobación definitiva. Cuando eso pase, el Executiu llevará el pacto al Parlament, donde empezará una tramitación que se podría alargar más de un mes.

De este modo, la tramitación de los presupuestos podría alargarse al menos hasta marzo.

Junts: “Pactar con Illa es poner fin a la legislatura del 52 por ciento”El portavoz de Junts, Josep Rius, alertó ayer de que si el Govern llega a un acuerdo presupuestario con el PSC “se habrá puesto punto y final a la legislatura del 52%”. “ERC habrá confirmado que lo ha dejado estar y que ha abrazado el autonomismo de manera definitiva”, dijo, antes de acusar a los republicanos de “preferir ceder con el PSC antes que pactar con Junts”.

Preguntado por una hipotética abstención que facilitase la aprobación de las cuentas, se limitó a decir que estarán “atentos a los acontecimientos que pasen las próximas horas”.Por otra parte, el portavoz de los comuns, Joan Mena, reclamó al PSC que “deje de marear la perdiz”, y recordó que el acuerdo entre su formación y el Govern es “firme”. En este sentido, dijo que lo darán por roto si se destina “un solo euro” a impulsar la carretera B-40, al Hard Rock o a la ampliación del aeropuerto de El Prat.