Un segundo policía infiltrado en grupos activistas de Barcelona

Un agente de la Policía Nacional se habría infiltrado en movimientos sociales de Barcelona para espiarlos desde dentro. Lo habría hecho, entre otros métodos, manteniendo relaciones con algunas jóvenes activistas para ganarse su confianza, según publicó ayer La Directa. Se trata de un mallorquín que se hacía llamar Daniel Hernàndez Pons, con unos apellidos casi idénticos a los de otro policía infiltrado en movimientos independentistas catalanes y destapado el junio pasado por el mismo medio.

El hombre, de iniciales reales D.H.P., ingresó en la academia de policía de Ávila en septiembre del 2017 y se convirtió en funcionario policial en junio del 2019. En mayo de 2020, se mudó a Barcelona y empezó a asistir y a participar en conciertos, fiestas y asembleas y otras actividades de entidades sociales del barrio. En diciembre consolidó su infiltración e inició una primera relación con una activista.

De hecho, llegó a intimar con ocho mujeres de este entorno. Llegó a participar en distintas protestas, entre ellas las manifestaciones contra el encarcelamiento del rapero leridano Pablo Hásel. Cuando en 2022 se destapó la infiltración de otro policía en grupos independentistas, rebajó su implicación y empezó a ausentarse de Barcelona.ERC, Junts, PDeCAT, CUP, Bildu y BNG pidieron ayer la comparecencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

Según los cupaires, los Mossos d’Esquadra habían tenido conocimiento del caso, por lo que exigieron también la comparecencia del conseller de Interior, Joan Ignasi Elena.