Moncloa ve la marcha de Ferrovial como un intento de tributar menos

Dos días después de anunciar el traslado de su matriz a Países Bajos, Ferrovial siguió recibiendo ayer críticas del Gobierno, que no se cree los motivos empresariales esgrimidos por la compañía y ve detrás el interés personal por pagar menos impuestos de su presidente, Rafael del Pino. En este sentido, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cargó contra Del Pino, asegurando que en España hay ejemplos de grandes empresarios “comprometidos con su país”, pero que después del anuncio de la salida de la compañía a Países Bajos, “queda claro que no es su caso”. Dijo que el Gobierno seguirá la situación para ver si el anuncio “corresponde con la legalidad”.

El Ejecutivo, que no cree que vaya a haber ningún efecto contagio, está molesto con la forma en que ha actuado, ya que no hubo una comunicación previa antes de hacer pública su decisión. Desde el PP responsabilizan al Gobierno por “ver a las empresas como enemigo”, según su coordinador general, Elías Bendodo, que dijo que el caso puede ser la “antesala” de la salida de España de otras empresas.Aunque la titular de Hacienda, María Jesús Montero, aseguró que “no hay una situación generalizada” de traslados de empresas fuera de España, Podemos prepara una iniciativa parlamentaria para evitar la deslocalización de firmas que hayan recibido ayudas públicas y para que, si finalmente se van, “tengan que devolver cada uno de esos euros que han puesto los españoles para mantenerlas a flote”. Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, aseguró que “esta semana” ha recibido mensajes de “preocupación” de empresarios por si hay cambio de Gobierno, dada “la confianza” que tienen depositada en el de Pedro Sánchez.Mientras, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, replicó que Ferrovial se queda “dentro de la UE y no va a un paraíso fiscal”, y pidió respeto a la decisión de la empresa, de la que recordó que ya tiene el 90% de su negocio fuera de España.La salida de Ferrovial de España ha servido a la presidenta del BCE, Christine Lagarde, para defender la importancia de “luchar por una unión del mercado de capital”.